Ecografía pulmonar en neonatos, tecnología puntera 'made in' Basurto
La unidad de neonatología del hospital bilbaino exporta a otros hospitales una prueba que evita la radiación en recién nacidos
Un neonato en una incubadora. / The Washington Post
Bilbao
Empezó por la curiosidad innata del que entonces era jefe del servicio, el doctor Pérez Legorburu. Así lo recuerdan quienes han sido sus discípulos y que hoy exportan ese saber en hospitales de todo el estado. Lorena Rodeño, neonatóloga y coordinadora del grupo de trabajo de ecografía neonatal de la Sociedad Española de Neonatología y Jon Montero, médico de la misma especialidad y miembro del grupo, han estado en 'Hoy por Hoy Bilbao-Bizkaia'.
"Las primeras publicaciones sobre ecografía pulmonar aparecieron en 2008", han relatado, "y de forma autodidacta el doctor Pérez Legorburu, que siempre estaba al día de todo, empezó a formarse, y le seguimos el resto". La técnica se fue instaurando, y en diez años el equipo completo estaba capacitado para practicar la prueba.
Pioneros
"Fuimos pioneros", cuentan con orgullo, "porque vimos la necesidad de integrar la ecografía con el resto de análisis, la exploración clínica". Integrarla en el día a día, y ante todo, al margen de ausencias puntuales de los miembros del equipo. "Para que sea eficaz tiene que estar disponible las 24 horas, debe saber hacerla todo el equipo", remarca Montero.
La ecografía pulmonar tiene como principal bondad que se puede practicar a todos los bebés y es inocua. "Evita todos los cambios que la radiación provoca en el DNA, y eso es especialmente importante porque tratamos con pacientes muy vulnerables, que a lo largo de su vida van a tener que enfrentarse a más estudios", explica Rodeño.
Investigación y difusión
Es un ejemplo más de cómo Osakidetza y sus profesionales se enfocan a la hiperespecialización. "La ecografía es mucho más precisa, nos permite ver lo que está pasando dentro del cuerpo y estamos más de acuerdo en lo que nos ofrece".
Este grupo de trabajo se caracteriza, además, porque exporta este conocimiento más allá del hospital de Basurto. Además de formarse, forman a otros compañeros. Han impartido cursos y estancias en centros sanitarios de Donostia, Burgos, Murcia, Canarias, Mallorca, Galicia... y empiezan el año con más citas en la agenda. "Hemos conseguido difundir esta herramienta", dicen. Para continuar y no parar la rueda reclaman tiempo.
"Parece que forma parte del contrato, que aprendas por ti mismo y lo difundas. Y es difícil porque hay que compatibilizar investigación, difusión, atención a los pacientes... Al final es tiempo que quitas de tu vida, y no solo de la jornada laboral", lamentan.
