Se cumple medio siglo de la Expedición Tximist al Everest

Vitoria-Gasteiz

En 2024 se cumple medio siglo de la primera expedición vasca al Everest. El germen fue en Vitoria. Juan Ignacio Lorente como líder del grupo y Juan Celaya (empresario de Cegasa) hicieron realidad un sueño. Había existido previamente una expedición a Los Andes que fue la inspiración de la Tximist. Catorce montañeros de los tres territorios vascos (no hubo navarros en el 74) intentaron la cumbre y llegaron a los 8.530 mts (Ángel Rosen y Felipe Uriarte). Al descender a Katmandú, Celaya le dijo a Txomin Uriarte, encargado de los permisos, que pidiera uno para otro año. Conseguiría el de 1980 que finalizaría con la cumbre de Pasang Temba y Martín Zabaleta.

En junio habrá celebraciones para recordar la Tximist del 74: en primer lugar, un acto en el Palacio Europa con los supervivientes y familiares. En segundo lugar, una exposición con veinte paneles que terminan con la foto del permiso del 80 y el lema "Volveremos", en tercer lugar, una quedada de ochomilistas vascos de la actualidad y, en cuarto y último lugar, una cena nepalí. Habrá música en directo, comida sherpa y ambiente himalayista. Todos los actos se presentarán convenientemente y estarán abiertos para toda la ciudadanía. La idea es empapar del espíritu conmemorativo a todos los ciudadanos de Vitoria y de la provincia de Álava. Una celebración de primer nivel.

Este año se cumplen también cien años de la fundación de la Federación Vasca de Montaña. La misma nació con la vocación de promocionar el deporte alejado de las grandes ciudades y su polución. El principal impulsor fue Antxon Bandrés y la puesta de largo tuvo lugar en Elgeta (Gipuzkoa). Además, se plantearon hacer una revista y pone en pie un museo. Pyrenaica es una realidad desde 1926 mientras que el museo se levantará en 2025 en el chalet Arkaute de Tolosa. Todavía hay que hacer unas obras de remodelación para que esté en condiciones.

Txomin Uriarte es presidente de EMMOA pero, además, estuvo en el grupo de 1974. "En aquella época se pensaba que la gente moría por encima de los 8.000 mts y que era imposible físicamente que una mujer pudiera subir a esta cima. Años más tarde se demostró que esos pensamientos eran erróneos. Todo había partido de una expedición en Los Andes. Luego fuimos al Everest y casi lo subimos. Al bajar, Juan Celaya me dijo que teníamos que pedir otro permiso y así lo gestionamos en Katmandú. En 1980 se cerró la aventura pero no habría existido esta cima sin la Tximist del 74", aseguró en la Cadena SER.