Crece la indignación por el arbitraje contra el Madrid

San Sebastián

La Real Sociedad sigue enfadada con la actuación arbitral de Munuera Montero en la visita del Real Madrid al Reale Arena. Se tiene muy claro que no perdieron el partido por culpa exclusivamente del colegiado, se ha hecho una autocrítica importante en Zubieta en la vuelta al trabajo tras la derrota y se ha concluido que la principal razón fue una vez más la falta de acierto en el área rival. Pero eso no quita para que el club txuri-urdin se sienta muy perjudicado por las decisiones que tomaron los colegiados, porque la realidad es que al final, lamentablemente, tuvieron efecto claro en el resultado final.

Todavía siguen sin entender en el vestuario de la Real Sociedad cómo se rearbrita la jugada del gol de Take Kubo en la primera parte, que servía para empatar el choque al poco del 0-1 marcado por Arda Güller. Cambiaba el panorama completamente. Y están totalmente desconcertados por como el VAR obvió absolutamente una clarísima mano de Carvajal dentro del área del conjunto blanco en la segunda parte. Son dos jugadas que podían haber cambiado el signo del encuentro, y quizá ahora estaríamos hablando de otra cosas muy diferente. Así lo entienden en el club donostiarra, desde la zona noble hasta el vestuario, pasando por el cuerpo técnico, con Imanol Alguacil a la cabeza, un entrenador que nunca habla de los árbitros, pero que tras el partido tuvo que morderse la lengua. “Pienso como Kubo, que eso en Champions no nos lo pitan, y mejor me voy a callar, porque sino…“.

En la Real Sociedad están convencidos de que en esa misma jugada en la Champions League no se pita falta, con el leve toque de Barrenetxea a Thouameni, que entienden no era suficiente como para que se cayera de la forma tan aparatosa como lo hizo, pero sobre todo que no era suficiente el contacto como para que se anulase un gol por esa circunstancia o como para que entrase el VAR, más cuando el árbitro estaba delante de la jugada y no vio nada punible, y Eda es una jugada de árbitro y no de VAR. Se lamentan de que desde el televisor se arbitrará de nuevo una jugada por una acción que no era como para ello.

Y lo que más les indigna en la Real Sociedad es que no se llamara desde el VAR a Munuera Montero en la jugada en la que Becker centra desde la izquierda y la pelota le pega claramente a Carvajal en la mano derecha. Molesta que se llamara tan rápidamente desde la sala VOR en el gol de Kubo y que en esa jugada de Becker ni siquiera se le hiciera ir, por lo menos, al televisor para verla, como se hizo en la otra acción polémica. Pero lo que más extraña es que en la retransmisión televisiva no hubiera casi repeticiones de la mano tan clara de Carvajal y que se pasara por alto de manera tan escandalosa.

Por supuesto, saben que nadie hará ruido por esa jugada, que ha pasado totalmente desapercibida, cuando a tenor de las imágenes, se ve que la mano existe, quitándole a la Real la opción de poder empatar el partido desde los once metros. Nada va a cambiar, y lo saben en San Sebastián, pero al menos que nadie les quite el derecho al pataleo, y a intentar que quede patente claramente el error del colegiado: les birlaron un penalti como una catedral por mano de Carvajal. La actuación arbitral influyó en el resultado final. Y eso es lo que molesta.