La SD Amorebieta se jugará la permanencia en la última jornada tras empatar sin goles ante el Espanyol

SD Amorebieta y RCD Espanyol empataron a cero en Lezama en un choque entretenido, aunque sin ocasiones, que deja al conjunto local vivo de cara a la última jornada y al visitante sin opciones de un ascenso directo que, de todos modos, tenía muy difícil. Lo que sí ha hecho el conjunto periquito en las Instalaciones del Athletic Club es fortalecer la ventaja de campo en la primera ronda de una fase de ascenso que ha certificado, a pesar de esta igualada sin goles.

Lo más destacado del encuentro fueron los goles de Javi Puado y Josue Dorrio, los dos en la segunda mitad, en los minutos 58 y 82, aunque ambos llegaron tras sendos fueras de juego. El 'Amore', por su parte, se ha asegurado posibilidades de permanencia en la categoría para una última jornada. En la que deberá ganar al Mirandés en Anduva para seguir en LaLiga Hypermotion.

De inicio, Manolo González introdujo dos cambios, dando entrada a Calero y Keita Baldé para hacer un equipo super ofensivo con tres centrales y totalmente volcado a dominar el juego en campo rival. Jandro Castro, por su parte, con Etxeita de nuevo en el once, volvió a los tres centrales y optó por Unzueta en punta de ataque en lugar del más habitual Jauregi. A quienes solo junto dentro de un 1-4-4-2. Las intenciones espanyolistas les dieron el control del juego en la primera parte, aunque yendo de más a menos porque en los últimos minutos el Amorebieta se sacudió el enorme dominio visitante y encontró varias contras.

La mejor una cabalgada de Murillo para plantarse ante Joan García, que abortó a tiempo El Hilali. Aunque también encadenó varios centros el Amore, dos de Morcillo y uno de Dorrio que obligaron a la línea defensiva visitante. Dos cortados por Milla y El Hilali y uno cabeceado fuera por Dorrio. Pero hasta entonces la primera media hora había sido totalmente del Espnyol volcando continuamente a ocho jugadores en las jugadas de ataque y buscando superar a la defensa local de todas las maneras.

En ese trabajo, aun sin ocasiones claras, las opciones más importantes llegaban cuando el balón caía en Pere Milla, que no paró de centrar ya fuera en juego a balón parado, y Braithwaite, al que le llegaron cuatro balones al área, todos bien defendidos por el entramado azul. Y cuando no despejaban o bloqueaban los defensas era Magunabeitia el que intervenía. Como en un falta al borde del área, en la que el danés buscó por abajo el segundo palo. Posteriormente, Etxeita bloqueó un duro disparo desde la frontal de Puado y al propio goleador visitante se le fue fuera un complicado cabezazo.

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El arranque de la segunda parte fue un toma y daca continuo que inició el Espanyol con un primer intento de Puado y un cabezazo con intención, pero poca fuerza y contunuó el Amore con una doble ocasión de Sibo a saque de córner y una salida a la contra de Unzueta que obligó a Joan García a salir apurado de su área. Incluso se marcó un gol. Pero Pere Milla recibió en fuera de juego cuando centro al segundo palo para que Puado batiese a Maguna.

Dos opciones seguidas de Braithwaite y Bare, sin suerte, dieron paso a un tramo final que abrió un remate de Puado, a las manos del meta local, a un centro desde la derecha. También el Amorebieta marcó su gol, aunque como el del Espanyol, en posición antirreglamentaria. Si bien en esta ocasión del rematador, un Dorrio que salió lesionado de la jugada, y no del centrador, Jorge Mier. Y aún tuvo una última ocasión el Amorebieta en el minuto 91, pero a Edwards se le marchó alto un remate a la media vuelta en el área.