Los beneficios del acogimiento familiar de menores: "Nos ha cambiado la vida"
La Diputación apuesta desde hace 27 años por un servicio de acompañamiento familiar que ha ofrecido la oportunidad de desarrollarse en un hogar alternativo a 2.000 menores que no pueden vivir con sus padres y madres
Acogimiento familiar en Bizkaia, 27 años y 2.000 menores
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Bilbao
Desde 1997, la Diputación Foral de Bizkaia ha apostado por el acompañamiento profesional especializado y la participación activa de familias que han dicho sí al acogimiento familiar de menores, niños y niñas adolescentes, para ayudar a su integración en la vida adulta. Un hogar estable y con pautas para crear vínculos que ayuden física y mentalmente al menor que en este territorio desde hace 27 años se ha aplicado a más de 2.000 menores. A día de hoy, son 294 los menores acogidos y en Hoy por Hoy Bilbao-Bizkaia nos hemos acercado a estas familias.
Lo primero es responder qué es el acogimiento familiar. Se trata de una medida de protección que ofrece la oportunidad a los niños, niñas y adolescentes que no pueden vivir con sus padres y madres de desarrollarse en un hogar alternativo durante el tiempo que sea necesario, garantizando su pleno desarrollo biopsicosocial.
Esto se hace porque la experiencia evidencia que un acompañamiento profesional especializado junto con la participación activa de las personas implicadas favorece una buena evolución personal y social de los niños, niñas y adolescentes para su posterior integración en la vida adulta. Es por ello que el acogimiento les aporta a los y las menores un hogar estable, cálido, normalizado, adecuado, con pautas educativas claras y contribuye a que las personas menores puedan crear nuevos vínculos, mejorar a nivel físico y emocional, conocer un modelo familiar adecuado y mantener su identidad y la relación con sus padres y/o madres biológicos, apoyando el proceso de vuelta en los casos en los que el retorno sea posible.
Para acceder a información sobre el programa, está disponible la web Acogimiento familiar - Bizkaia.eus, también en el teléfono 944 470 737 o en la dirección de correo electrónico acogimientofamiliar@bizkaia.eus.
Acogimiento especializado
En el Área de Acción Social de la Diputación existen cuatro tipos de acogimiento: de urgencia, temporal, permanente y especializado. Este último requiere además de una dedicación especial, que alguno de los miembros de la familia de acogida cuente con formación específica y experiencia profesional en el ámbito de la educación, la salud o los servicios sociales.
Un ejemplo es Ainara Atutxa, profesora y ama de una niña de 16 años, ella cuenta que "mi niña no es una niña pequeña y en principio es una persona formada, con sus experiencias, esa es la diferencia, que es una adolescente. Sobre qué le llevo a acogerla, Atutxa indica que "yo la conocí debido a mi trabajo, previamente había oído hablar de la acogida familiar pero nunca me lo había planteado en serio, pero había conexión entre nosotras y me animé".
Añade que le animó "que la adolescencia es una etapa más y tiene sus pros. En cuanto a nuestra relación, cambia porque hay proceso de acoplamiento y ya cuando está en tu casa pasas a cumplir una función de madre, a la vida cotidiana".
En su caso, "hemos encontrado el equilibrio, al ser adolescente es muy consciente de lo que haces por ella. Al principio da vértigo, pero no resulta tan difícil si uno tiene claro que es amor, cariño, límites, protección...".
Niños y niñas de todas las edades
En el caso de Álvaro Ortiz de Zárate y Basilio Astulez, ellos son una pareja que acoge a un niño de tres años y medio y dejan claro que la experiencia "nos ha cambiado la vida, ahora tenemos un peque de tres años en casa", algo que repetirían sin dudar.
Han dado el paso porque "tenemos una relación de pareja muy larga y la idea siempre había estado ahí". Dicen que "si la gente tiene esa idea, esa inquietud de hacerlo, el programa está preparado para ayudar en esa etapa de discernimiento. Nosotros acudimos a una charla de formación para ver, para que nos explicasen, siempre desde una perspectiva de ofrecimiento. Creemos que hemos hecho un nido muy bonito y que este súper nido lo podemos ofrecer y que tiene que ser adecuado para la necesidad de este menor".
Sobre la experiencia, explican que "cuando ya es un hecho, que hay un peque que tiene un nombre nos echamos a templar, pero hemos hablado con gente cercana y nos hemos dejado aconsejar mucho. Lo hemos vivido con mucha ilusión".
Formación y acompañamiento
"Esta aventura tiene un elemento muy importante, estás muy acompañado por el programa", explican Álvaro y Basilio. Esto mismo lo cuenta también Isabel Cárdenas, trabajadora social del Servicio de Infancia de la Diputación Foral de Bizkaia, "esto es 24/7. El proceso comienza con charlas informativas todos los meses, son en la Diputación y a lo largo de tres horas se explica a cargo de dos técnicos contamos en qué consiste, requisitos, qué papel se tiene a nivel legal".
Tras ello, si la persona interesada quiere dar el paso, "tienes que solicitar ser parte de un proceso de formación, cuatro sesiones en las que se profundiza en el acogimiento familiar, hay una charla de una familia y una vez acaba la formación ya tienes los elementos necesarios para decidir. Recibes un título y pasas a la fase de valoración con entrevistas psicosociales en las que orden foral de adecuación donde se dice que son adecuados para acoger. En este punto los técnicos hacemos el match para encajar niños o niñas y familias".
Sobre la formación Ainara añade que "en todo este proceso ya te vas imaginando cómo va a ser, cómo vas a actuar, al final es cómo un padre o madre biológica".