'Detrás del pelotón': Gino Bartali y el cuchillo
Iñigo Markinez y Javi Bodegas nos acercan a lo largo del Tour de Francia 2024 las intrahistorias de los nombres, lugares y momentos que han marcado estos 111 años de 'la Grande Boucle'
'Detrás del pelotón': Gino Bartali y el cuchillo
Bilbao
Los hechos fueron graves. Desde el año anterior, se vivía en Francia una ola anti italiana y Gino lo vivió en sus propias carnes. En los puertos intentaba rodar siempre en compañía, lo hacía junto a Robic y algún otro francés para protegerse de los insultos, escupitajos y patadas que le lanzaban de vez en cuando algunos energúmenos.
Algunos de los ciclistas defendían al italiano utilizando la bomba como si se tratara de un arma abriéndose paso entre la enfervorizada multitud. En la subida al Aspin, una exaltada muchedumbre invadió la ruta provocando la caída del italiano Bartali, que ganaría la etapa en Saint Gaudens, y Robic. Estando en el suelo, más de un espectador aprovechó el caos para agredir e insultar a Bartali que, asustado, vio que uno de ellos de le acercaba con un cuchillo en la mano. Sobre este caso, citar que lo que en un principio Bartali creía que era un intento de agresión, debió ser que un paisano que estaba comiendo se acercó a ver qué pasaba sin darse cuenta que llevaba el cuchillo en la mano y el chorizo en la otra.
Varios golpes
Al italiano le cayó más de un golpe y hasta hubo quien intentó llevarse la máquina del trasalpino, todo en un corto espacio de tiempo. Ya en el hotel, Bartali anunció que no iban a salir en la siguiente etapa puesto que habían sido víctimas de diferentes agresiones. El director de la escuadra Alfredo Binda apoyaba sin reparos la decisión se su pupilo.
Se retiraban, por tanto, los de la selección nacional y el equipo de jóvenes, los Cadeti, que contaban con Magni que se acabada de hacer con el maillot amarillo, maillot que pasó a las espaldas del suizo Ferdi Kubler que por deferencia a su rival no lo vistió en la salida de la etapa. El caso es que no todos los italianos estuvieron de acuerdo con la medida, y menos Fiorenzo Magni que había visto llegar su momento de gloria en las rutas francesas. Goddet, patrón del Tour, como es lógico tampoco estaba de acuerdo con la retirada de los italianos.
Les propuso competir con unos maillot sin distintivos para que no fueran reconocidos por el público además de anunciarles una mayor presencia de la gendarmería en funciones de escolta. Nada. La etapa partió sin italianos y Kübler ganaría la clasificación final; visto lo que había y para evitar males mayores se sustituyó el final de etapa previsto en San Remo por otro dentro del territorio francés. Los nacionalismos afloraban en Europa.
Tour de 1950
Estamos en el Tour de 1950, Bartali, al mando del equipo italiano, había ganado los Tours de 1938 y 1948 con diez años de diferencia y era el máximo favorito ante la ausencia de Fausto Coppi, ganador el año precedente. Se disputa la primera etapa de los Pirineos, la 11 con los puertos de Aubisque, Tourmalet y Aspin. El público está muy excitado, muy animoso a favor de los suyos y en contra de los italianos. Subiendo Aspin caen Bartali y Robic debido a la cantidad de gente que está al lado de la carretera.
Aficionado cuchillo en mano
Cuando caen los aficionados se abalanzan sobre los dos para levantarlos, mientras que algunos, muchos de ellos borrachos, insultan y agreden a Bartali al que le echan la culpa del accidente como si hubiera querido tirar a Robic. Se asustó, Hasta se le acercó uno con un cuchillo que le metió el miedo en el cuerpo. Estaban fuera de sí, aunque posteriormente perezca que no fue un intento de agresión, sino que un hombre del cuchillo lo tenía en la mano para cortar pan o chorizo o vete tú a saber. El caso es que la etapa llegó a meta y ganó Bartali.
El italiano Magni, del equipo B de Italia, nuevo líder. En meta Bartali denunció insultos, patadas, puñetazos y agresiones ante los periodistas y también su enfado. “Temo por mi vida”, afirmó. A la tarde reunión de los dos equipos de Italia y deciden dejarla carrera. “Hemos sido agredidos, como consecuencia no salimos mañana”, anunció luego. … Bartali no quería salir y había convencido a los demás a pesar de que Magni no quería. Se comentó que había celos, que Bartali no aceptaba el maillot amarillo de Magni. Para echar más leña al fuego, Bobet no negó los insultos, pero negó que hubiera sido agredido.
Sin italianos
Daba igual. Goddet, el patrón del Tour, intentó convencer a Bartali e incluso les ofreció correr sin maillots distintivos para pasar inadvertidos ante el público (ya lo habían hecho años atrás con Ottavio Bottechia), también escolta particular... Se salió sin los italianos, el nuevo líder era Ferdi Kubler que, por respeto, no se vistió de amarillo en la siguiente etapa. Tras esto hubo guerra. Los periodistas italianos presentaban a los espectadores franceses como animales y la organización pensó que no era oportuno que la carrera llegara a Italia, a San Remo, etapas más adelante por miedo a represalias contra ellos y los galos. No fueron y no entraron en Italia.
Años antes, en el Tour de 1937 el potente equipo belga con Sylvere Maes, ganador de la edición precedente y maillot amarillo entonces, a la cabeza abandona en pleno tras la etapa de Burdeos hartos de las agresiones de los seguidores de Lapebie y de las incongruencias de la dirección del Tour en favor del ciclista francés. Maes y los suyos amenazaron con el abandono conjunto si los jueces no retiraban la sanción de tiempo impuesta a su líder. El Tour no cedió y el pelotón partió rumbo a Royan sin los belgas pero con Lapebie al frente, ganador final.