Descubren una gran 'piscina' romana y una construcción de 3.000 metros cuadrados en Arkaia

La tierra no deja de dar sorpresas en Álava. Hace pocos día que conocíamos el hallazgo de un circo romano en Iruña-Veleia, que les contamos en Cadena SER Vitoria, y, lo cierto es que en Arkaia, la segunda ciudad romana más importante del territorio, también hay nuevos hallazgos.

En Arkaia se encuentra el complejo termal mejor conservado de Álava y estas termas se integraban en una población mayor, Suestatium, que se ubicaba al lado de una vía romana muy importante: la Iter 34 que unía Astorga y Burdeos. Arkaia es, tras Iruña-Veleia, la segunda ciudad romana más importante del territorio y, al igual que en Iruña, solo se ha excavado entre un 1% y 2% de las 20 hectáreas que se cree que ocupa.

Este mes de julio, los arqueólogos Miguel Loza y Javi Niso, han vuelto a remover la tierra con la intención de localizar el límite sur de las termas dentro de un proyecto trianual, financiado por el Gobierno Vasco, que busca tener una visión más "integral", del yacimiento. El cierre sur, y el lugar donde se localizaría el horno para calentar las termas, se ha encontrado pero, además, se ha localizado una importante infraestructura hidráulica.

"Digamos que es una balsa de una anchura de 8 metros, una 20 de longitud y una profundidad es de 2 metros y medio", nos cuenta Niso. No se conocen las dimensiones reales de la balsa porque parte de ella está en una parcela privada.

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La pregunta del millón es para qué se utilizaba. En un primer momento los arqueólogos pensaron que era para abastecer de agua a la ciudad pero lo han descartado por varias razones. "Lo primero porque la balsa está a cielo abierto y lo segundo porque no estaba revestida por morteros hidráulicos y el agua no podría mantenerse limpia", señala Loza que destaca los "canales de abastecimiento que conectan con la balsa hacia el sur".

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Así que los arqueólogos creen- a falta de más investigaciones- que la balsa conectaba con el río Santo Tomás y lo que se utilizaba para "canalizar ese río y para aprovecharlo en épocas de crecidas". "Creemos que en épocas de crecidas del río los romanos lo canalizaban con compuertas para aprovechar el agua", señala Miguel Loza que especula con que podría "aprovecharse para abastecer las termas"

¿Gran domus o mansio?

Frente al espacio donde se ubican las termas hay un gran campo de cereal bajo el cual, duerme la ciudad romana. Con la misma técnica que se usó en Iruña-Veleia, a través de drones , se ha localizado en esta parcela una construcción bajo tierra de 3000 metros cuadrados. Al igual que en el caso del circo romano del yacimiento arqueológico alavés, ha sido la empresa Arkikus la que ha dado con este domus.

"Tenemos bastante seguridad de que en esta finca hay una construcción de dimensiones bastante grandes que podría albergar varias casas o una gran casa", nos cuenta Niso. "Hablamos de un cuadrado de 3000 metros sin calles por dentro y muchos muros y patios", apunta el arqueólogo.

Hay diferentes posibilidades: puede que se trate de una manzana de viviendas, de un colegio, de una gran casa romana o de una mansio, una parada oficial de la calzada romana." "Intuimos que tiene que haber una mansio y podría estar aquí por la dimensión del espacio y por la cercanía de la Iter 34", apunta Loza. Para despejar algunas de estas dudas, Loza y Niso están pidiendo ya los permisos para poder relizar catas este verano-otoño.

"Queremos verificar la presencia de la Iter, la dirección del canal de la gran piscina y saber más de esa construcción", nos ha contado Loza.

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Centro de interpretación

Por delante mucho trabajo. Además de la excavación realizada por la empresa Iterbide este año, los arqueólogos quieren realizar prospecciones electromagnéticas en diferentes parcelas agrícolas. "Son técnicas no invasivas y nos dan ciertas pistas de lo que hay debajo de la tierra", cuenta Loza. Además se quieren poner paneles por todo el pueblo para "divulgar el conocimiento de la ciudad romana donde hemos excavado en diferentes casas alejadas de las termas", apunta Niso. Además, están pensando hacer itinerarios para niños.

Por si fuera poco, de la mano de la Junta Administrativa, valoran poner en marcha un Centro de interpretación del yacimiento en la bolera del pueblo. "Hemos pensado hacer materiales audiovisuales, poner algunos paneles y vinilos y que se convierta en el centro de partida de las visitas", nos ha desvelado Loza que apunta a 2025 como el año para tener todo esto en marcha. El año que viene se quiere también tener elaborada una memoria científica y una guía.