"Nos encontramos en un momento de revolución por la irrupción de la inteligencia artificial"
Sendoa Ballesteros, enfermero de Osakidetza y responsable de la unidad de innovación del hospital de Santa Marina en Hora 14 Euskadi sobre la implementación de la IA en el sector de la sanidad

Entrevista a Sendoa Ballesteros
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Bilbao
El Hospital de Santa Marina, a través de su unidad de innovación liderada por Sendoa Ballesteros, está marcando un hito en la integración de la inteligencia artificial en el ámbito sanitario. En Hora 14 Euskadi, Ballesteros, enfermero de Osakidetza y responsable de la unidad de innovación del hospital, ha destacado el impacto transformador de la IA en la mejora de los tratamientos y la humanización de la atención al paciente.
La democratización de esta tecnología ha permitido su incorporación en sectores como la sanidad, donde ya se están observando sus beneficios. "Nos encontramos en un momento de gran cambio, incluso podríamos hablar de un momento de revolución, por la irrupción de las inteligencias artificiales, ya no solo en el mundo profesional, sino también en el personal," ha señalado Ballesteros.
Uno de los proyectos más destacados del Hospital de Santa Marina, que recientemente fue galardonado con un premio de buenas prácticas, es el uso de IA para mejorar la comprensión de los documentos de consentimiento informado. "Hemos utilizado herramientas de IA para procurar humanizar un documento que es muy importante, como son los consentimientos informados," ha explicado Ballesteros. Gracias a la IA, los textos técnicos se reformulan para ser más legibles y comprensibles para la población general, lo que ha reducido la dificultad de lectura y ha mejorado la accesibilidad de la información.
A pesar de las ventajas, Ballesteros reconoce el desafío que representa la despersonalización de la atención al paciente por el uso de la IA. Sin embargo, defiende que esta tecnología puede liberar a los profesionales de tareas administrativas, permitiéndoles concentrarse en la atención directa al paciente. "Imaginemos una consulta médica en la que un paciente tiene una conversación clínica con un médico. La cantidad de tiempo que el médico pasa mirando el ordenador en vez de estar en contacto visual con el paciente es algo que podríamos reducir con IA, permitiendo que la tecnología transcriba la conversación y organice la información relevante," ha afirmado.
Mirando al futuro, Ballesteros anticipa un crecimiento en la colaboración con el Instituto de Investigación Biomédica Bio Vizcaya y el desarrollo de herramientas de IA de apoyo diagnóstico, que podrían ofrecer aproximaciones diagnósticas e incluso sugerencias terapéuticas para casos complejos. "Podríamos llegar a tratar cierto tipo de heridas complejas en lugares remotos o en personas que no sean expertas en esa materia," ha añadido.
Con proyectos como estos, el Hospital de Santa Marina se posiciona a la vanguardia de la innovación en salud, utilizando la inteligencia artificial no solo para mejorar la eficiencia, sino también para humanizar y personalizar la atención médica.




