Otro avistamiento de mapaches en la costa vasca. En esta ocasión, el animal ha sido localizado en Lekeitio, cerca del faro de Santa Catalina, según ha compartido en redes sociales el usuario @mamua. No es la primera vez que se encuentran mapaches, una especie originaria de Norteamérica, en Euskadi. De hecho, como adelantó Radio Bilbao, la Diputación lleva tiempo mostrando su preocupación por la posible expansión de este animal, considerado invasor y una seria amenaza para la fauna local. Esta especie norteamericana llegó a Europa hace aproximadamente un siglo, introducida por la industria peletera o liberada por cazadores que la consideraban una nueva oportunidad cinegética. Muchos de los mapaches que escaparon de las granjas peleteras crearon poblaciones estables en el centro de Europa, lo que ha derivado en un problema medioambiental considerable. En el caso de los mapaches encontrados en la península ibérica, el origen parece tener más que ver con la moda de adquirirlos como mascotas cuando son crías. Al crecer, se vuelven agresivos y difíciles de manejar, lo que lleva a muchos propietarios a abandonarlos, agravando así la situación. El principal problema es que los mapaches son animales con una increíble capacidad de adaptación. Son inteligentes, curiosos y se desenvuelven muy bien en entornos urbanos, donde encuentran comida fácilmente en la basura que desechamos. Además, su dieta omnívora, con una clara preferencia por la carne, los convierte en depredadores temibles: atacan nidos de aves, se alimentan de huevos, crías, anfibios e incluso crustáceos, causando graves daños a las especies autóctonas. La preocupación por la proliferación de estos animales sigue creciendo, y tanto expertos como instituciones recalcan la importancia de no subestimar los efectos negativos que esta especie invasora puede tener en los ecosistemas locales. La aparición de un nuevo mapache en Lekeitio refuerza la necesidad de tomar medidas para controlar y prevenir su expansión.