El ratoncito Pérez nació en Altzola
Nerea Alustiza recorre en Hoy poy Hoy Eibar la historia del balneario inaugurado en 1846 y cuya agua es beneficiosa para la salud
Nerea Alustiza repasa la historia del Balneario de Alzola
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Elgoibar
La historia del balneario de Alzola arranca en 1775 cuando descubren a unos jóvenes bañándose en pleno invierno en el agua del río y ahí averiguan que se tratan de aguas termales. Aunque no sería hasta 1846 cuando se inauguraría el balneario después de que el alcalde Pero Aristáin declarar el agua de utilidad pública en 1843 y mandase construir el balneario en 1844.
Según relata la historiadora Nerea Alustiza este balneario ha contado con distintos reconocimientos internacionales por la calidad de sus aguas. "Se tratan de aguas muy reconocidas, tienen gran pureza, calidad y son beneficosas para la salud", concluye.
Fue destino de diversas personalidades de clase alta con poder adquisitivo: nobles, grandes magnatarios de la iglesia o políticos como el presidente Sagasta.
Entre ellos visitó este balneario el escritor jesuita Luis Coloma muy cercano a Maria Cristina, regente y madre de Alfonso XIII. Cuando el joven rey tenía 8 años se le cayó un diente y su madre pidió a Coloma que redactase un relato con un personaje.
Así el escritor escribió un cuento en Alzola en el que figura el ratoncito Pérez. De este relato deriva la tradición de dejar el diente debajo de la almohada para que al día siguiente haya caramelos.