"El PNV funciona como un sanedrín y eso no sirve”: Anasagasti critica la falta de debate interno en el proceso de renovación de ejecutivas

Bilbao

Este martes concluye la primera vuelta del proceso de renovación de las ejecutivas territoriales del Partido Nacionalista Vasco (PNV) en Bizkaia y Álava, tras finalizar en Gipuzkoa el domingo. Durante su intervención en La Ventana Euskadi, el exsenador y exdiputado Iñaki Anasagasti se mostrado muy crítico con el sistema interno del partido, al que ha acusado de carecer de un debate abierto y sincero, y de operar, en sus palabras, “como un sanedrín”.

Anasagasti, habitual contertulio del programa de la Cadena SER en Euskadi, cuestiona la estructura organizativa del PNV en el contexto de este proceso electoral interno. “A mí no me gusta”, afirma, insistiendo en que el debate dentro del partido debería ser transparente y abierto, “como se hace en la calle”, en lugar de limitarse a una gestión centralizada y sin cuestionamiento.

El veterano político subraya que, aunque aún no ha finalizado la primera vuelta, ya se han publicado reportajes y declaraciones sobre “los favoritos” para liderar en Bizkaia y Gipuzkoa, en referencia a titulares recientes que dan por favorito a Iñigo Ansola en Bizkaia. “Favorito, ¿de quién?”, señala Anasagasti, que considera que estos reportajes intentan reducir la importancia de los candidatos críticos y presentar el proceso como un mero trámite para las candidaturas oficialistas.

Avances en la primera vuelta y tensiones internas

En esta primera fase, el PNV ha convocado votaciones en los tres territorios para elegir los representantes que competirán en una segunda vuelta. En Álava, la oficialista Jone Berriozabal y el crítico Gorka Urtaran han avanzado, mientras que en Gipuzkoa lo han hecho la candidata oficial María Eugenia Arrizabalaga junto a Eneko Goia e Imanol Lasa. En Bizkaia, además del oficialista Iñigo Ansola, también ha logrado el pase David Salinas-Armendariz, candidato respaldado por el sector crítico.

Para Anasagasti, estos resultados muestran una resistencia a las “conducciones autoritarias” en un proceso que, a su juicio, “no está siendo el paseo militar” que algunos habrían anticipado. También apunta que esta situación refleja un creciente descontento entre las bases, donde, asegura, “hay un cuestionamiento ante los últimos resultados y conductas privadas” que, en su opinión, no se corresponden con los estándares éticos que deberían regir al partido.

El exsenador también critica el cambio de enfoque que, según él, ha realizado la dirección del PNV en la gestión del proceso. “Ortuzar dijo que primero había que hacer un análisis sobre el proyecto, luego sobre la organización y finalmente sobre las personas. Pues lo ha cambiado”, ha señalado, refiriéndose a la prioridad que parece haberse dado a la renovación de cargos en lugar de a la revisión de las políticas y estrategias del partido.

Críticas a la vida interna del partido

Anasagasti ha terminado su intervención con una crítica a la vida interna del PNV, que considera que se encuentra “muy muerta”. En sus palabras, muchas sedes o batzokis “están cerrados” y no se han convertido en espacios de debate y actividad. “Eso tiene responsables, pero de eso no se quiere hablar”, ha asegurado.

Las votaciones de esta primera vuelta finalizan hoy en Bizkaia y Álava, en un proceso que continuará en las próximas semanas con la segunda ronda y que definirá las nuevas ejecutivas territoriales del PNV.

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