Bilboko Herri Krosa: correr por el placer de correr
La prueba celebra su 35 edición con la misma filosofía con la que nació en la que todos son ganadores
La Herri Krosa reunirá a cerca de 8.500 participantes
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La Herri Krosa suma una nueva edición este próximo domingo. Este año se cumplen 35 años de una prueba que no se aleja ni lo más mínimo de sus orígenes. Su éxito reside en ello. Mantener su singular filosofía anima a muchos corredores que no son habituales del running a vestirse de corto en la matinal de un domingo de noviembre. Todos los participantes son iguales para la organización, todos reciben el mismo premio, todos son ganadores. Todos salen en la foto. Las calles de Bilbao se tiñen de miles de atletas que visten la misma camiseta.
8.500 participantes
Los organizadores esperan que hasta el domingo el número de inscritos alcance los 8.500 participantes. Su idiosincrasia permite a los organizadores no depender del número de atletas que se inscriban. Se puede decir que tienen una clientela fija. "Son las cifras en las que nos estamos moviendo en los últimos años. Nos mantenemos estables y eso es algo muy positivo porque cada vez hay más oferta de carreras populares. No buscamos ningún récord Además, contamos con que el tiempo nos acompañe y esas previsiones hacen que en las horas previas se apunte más gente. Estamos felices y muy contentos porque es una prueba que la sentimos muy nuestra", explica Iñaki Oria, organizador de la prueba.
Caben todos
"Lo que ocurre con la nuestra es que sigue siendo una carrera sin objetivos de marcas, absolutamente popular y donde caben corredores que quieren probarse, amigos que quedan para correr, familias que se juntan un día como este, y ese abanico abre la participación a todo el mundo. Y que, por lo tanto, hace que la forma de disfrutar de Bilboko Herri Krosa sea absolutamente personal, de tal manera que hay quien compite con todos, otros consigo mismo o con sus amigos, y muchos que no compiten con nadie", se apunta desde la organización.
Recorrido clásico
El año pasado el paso de la carrera por San Mamés fue el gran atractivo, pero en esta ocasión la prueba regresa al recorrido habitual. "Así es, volvemos al recorrido que todos conocemos y que lleva ya muchos años existiendo. Hubo un trazado original que de Deusto volvíamos por el Campo de Volantín, pero que se modificó por las circunstancias urbanísticas. Saldremos de la Gran Vía, cerca de la Diputación, donde estará la meta también. De ahí, nos dirigiremos hacia la Plaza Circular, Hurtado de Amezaga, Autonomía, Sabino Arana, Sagrado Corazón, Plaza Euskadi, Deusto, Sarriko, y regreso por Lehendakari Agirre de nuevo hasta llegar a Mazarredo y de ahí a la Gran Vía", explica Oria.