Las obras para convertir la antigua clínica Arana en un centro de refugiados comenzarán en diciembre
La previsión del Gobierno central es que arranquen en la primera quincena del mes que viene y se prolonguen durante 14 meses
Vitoria-Gasteiz
Las obras de rehabilitación de la antigua residencia Arana, en Vitoria, para la construcción de un centro de refugiados con 350 plazas comenzarán la primera quincena de diciembre con la previsión de que duren unos 14 meses.
Con una superficie construida de 16.500 metros cuadrados el edificio llevaba diez años en desuso, con su consiguiente deterioro. El coste de las obras será de unos 16 millones de euros y será financiado por los fondos europeos Next Generation.
El nuevo centro contará con espacios comunes, como aulas formativas en las que se proporcionará a los residentes conocimientos que les permitan integrarse en la sociedad; además se construirán en los espacios exteriores áreas de convivencia y zonas de juegos infantiles, ha informado este martes el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
El proyecto de rehabilitación prioriza la conservación de los elementos originales del edificio, con mejoras en su eficiencia energética, que reducirán en al menos un 30 % el consumo de energía no renovable, y la instalación de sistemas de energía solar.
Además, el Comité Olímpico Español ha asesorado al Ministerio para incorporar al proyecto instalaciones deportivas, como una sala polivalente para actividades grupales, un gimnasio con equipos de musculación y cardio, y una pista exterior de fútbol y baloncesto.
Según el Gobierno de España, la finalidad de estos espacios es impulsar acciones y programas que utilicen el deporte como herramienta de integración de los refugiados.
El pasado mes de octubre la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, aseguró en una visita a Vitoria que la creación del centro de refugiados en esta ciudad iba "según los plazos establecidos".
Horas después de estas declaraciones, el departamento competente en esta materia del Gobierno Vasco, dirigido por el PNV, reiteró su "disconformidad con el modelo" elegido para este centro y reiteró su apuesta por "modelos que garanticen la atención individualizada y fomenten procesos de inclusión de y para las personas acogidas".