Juan Vergara ‘Camiño’: “Traer de la Unión Soviética un jugador antes era como mandarles a la luna”
El que fuera representante de deportistas nos muestra una cara desconocida del deporte
Entrevista al ex seleccionador de futbol de origen eibarrés Juan Vergara 'Camiño'
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Eibar
Juan Vergara, más conocido como Camiño, fue futbolista del Eibar, presidente del Arrate y también representante de futbolistas, lo que lo convirtió en una eminencia en la ciudad armera. Este eibarrés ha trabajado con multitud de equipos lo que le ha llevado a compartir mesa con Vladimir Putin y Maradona.
Su recorrido como seleccionador empieza en el baloncesto y balonmano mediante una empresa en Bilbao, logrando varios jugadores para el Bidasoa Irun como Oleg Kisselev (1994-1996). Tras ello arrancó en el futbol con gran presencia en la unió Soviética. "Habíamos encontrado un camino rápido para los visados y los permisos, que entonces eran muy problemáticos", explica.
Entre sus fichajes más conocidos están Aleksander Mostovói o Valeri Karpin. Con algunos de los fichajes que traía mantiene relación, pero con muchos no: "En el fútbol el agradecimiento no existe".
Comidas históricas
Cuenta que para los y las fichajes venir a España era como hacer un viaje al espacio porque todo era nuevo: “Traer de la Unión Soviética un jugador antes era como mandarles a la luna”. Aunque el idioma no era el mayor inconveniente pues según confiesa aprendían rápido.
Este trabajo le ha valido para cosechar grandes anécdotas como sus almuerzos con personalidades que por diferentes motivos han pasado a la historia. "He comido dos veces con Putin y he cenado dos veces con Maradona", recuerda.
La Mano de Dios de Camiño
Este representante de futbolistas confirma en 'Hoy por Hoy Gipuzkoa' lo que era un rumor, que antes de que Maradona marcará el gol conocido como 'La Mano de Dios', él ya lo había hecho en la temporada 65-66 con la SD Eibar.
En un partido de ascenso a segunda división frente al equipo mallorquín Constancia Camiño anotó un tanto con la mano: "El portero me puso la pelota a huevo, se la quité con la mano y la metí; los linieres y el árbitro solo vieron como entraba el balón porque estaban de espaldas". Aunque asegura que él golpeo la mano del portero y no el balón.
Tras el partido no hizo declaraciones a la prensa, pues generó gran revuelo y el enfado en la bancada mallorquina. Sin embargo, esto no fue suficiente para lograr el ascenso a segunda división pues en el partido de vuelta en Mallorca, el Constancia logró la victoria eliminando al equipo armero.