Oihane Valdezate, jugadora de la Roma, ve la luz al final del túnel: “Pisar el césped te motiva a seguir”

Bilbao

Oihane Valdezate está inédita esta temporada. Desde que el pasado mes de agosto se rompió el ligamento cruzado de la rodilla derecha, solo tiene en mente un objetivo: recuperarse lo antes posible y volver fuerte para ayudar a su equipo. La de Trapagaran ya sabe lo que es ganar un título con la elástica del equipo italiano, y estos días es una analista de excepción de la eliminatoria de octavos de final de la Europa League que la versión masculina de su equipo y el Athletic están enfrentando.

Y es que, aunque en el club romano los equipos masculino y femenino tienen ciudades deportivas completamente independientes, Oihane ha frecuentado en los últimos meses la de los chicos como parte de su tratamiento de rehabilitación de la lesión. Así que el contacto con el equipo de Ranieri es mayor. Y la jugadora reconoce que ellos "han cambiado bastante".

No estará en San Mamés

Poco tiene que ver el actual equipo de Ranieri con el que el conjunto rojiblanco enfrentó en el inicio de la fase de liga de la competición europea, allá por septiembre. La culpa, en buena medida, es, según Oihane, del técnico: "Sigo sus partidos y es verdad que el equipo ha cambiado bastante. Por aquí han pasado muchos entrenadores y no se ha visto a raíz de eso gran cambio, pero esta vez sí", asegura en Radio Bilbao.

Por ello, anticipa una eliminatoria "disputada". No podrá estar en San Mamés la próxima semana, reconoce con pena, pero "disfrutará mi familia por mí". Y es que a ella, como athleticzale, "me gustaría muchísimo, más aún siendo el partido definitivo, pero no tengo posibilidad de ir, no tengo días". Tiene que seguir trabajando día a día para estar de nuevo disponible cuanto antes.

Cerca de volver a jugar

Y Oihane ya ve cerca su regreso: "Lo importante es que estoy ya trabajando con balón, en el campo, para poder volver lo antes posible. Todavía no hay fecha, pero ya queda poco, lo más duro ha pasado y ahora toca entrenar fuerte para volver lo antes posible", afirma. No esconde que "se ha hecho largo", sobre todo "las primeras semanas", ya que "prácticamente no podía hacer nada". Ahora, sin embargo, "ya voy viendo la luz. Pisar el campo ya motiva a seguir".

Todavía entrena en solitario, pero el gran cambio fue dejar de entrenar únicamente en el gimnasio para hacerlo sobre el césped. "No todos los días son bonitos, pero en ningún momento he llegado a no querer ni hablar con la gente de ello", confiesa. "Al comienzo ves por delante un camino largo, no sabes si vas a poder volver bien", añade Valdezate.

El aspecto mental

Es la suya una lesión relativamente habitual en el mundo del fútbol, por lo que al comienzo le llegaron todo tipo de experiencias: "He tenido siempre cerca a jugadoras que han sufrido esta lesión. He recibido todo tipo de opiniones, algunas diciendo que iba a estar baja. Yo, desde que recibí el diagnóstico de rotura del cruzado, he tenido una mentalidad positiva. Me he centrado en trabajar y en pensar en salir adelante", asegura.

Esa mentalidad ha sido, según la jugadora, clave en su recuperación: "De primeras cuesta y puede ser una lesión en la que mucha gente dude de cómo vas a recuperarte, tanto mental como físicamente, pero yo a nivel mental no he tenido dificultades. Eso me ha ayudado también a entrenar de manera más positiva e incluso a recuperarme más rápido y de manera más fácil", sostiene.

Pese a estar en Roma, Oihane no se olvida de Bizkaia ni del Athletic. "Siempre sigo, tanto al masculino como al femenino", asegura. En el caso de esta eliminatoria, opina que para el equipo de Valverde "el partido del fin de semana fue un choque. No creo que fuera merecido que acabara así, pero eso no quita su cuarto puesto en LaLiga". Sobre lo que les viene, también es optimista: "Veo al equipo muy fuerte y competitivo. Están muy preparados para lo que viene".