Paquita Sáenz de Urturi : “Cuando llegaba a una excavación, me preguntaban: ¿Y el arqueólogo, dónde está?"
Hablamos con la pionera arqueóloga que ha recibido, junto a seis mujeres más, uno de los reconocimientos de la Diputación Foral de Álava de cara al 8M

Hablamos con dos mujeres destacadas por la Diputación Foral de Álava como mujeres Laiak.
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Vitoria-Gasteiz
Empezó a excavar con 19 años y desde 1975 no ha parado. La arqueóloga Paquita Sáenz de Urturi es una de las pioneras, en este ámbito, en Álava. "A veces, cuando llegaba a una excavación, me preguntaban: ¿Y el arqueólogo, dónde está?", nos cuenta. No ha sido la única vez. Una vez llegó el promotor de la obra y me pregunta : ¿Cómo, tú estás casada?" Digo, "Sí, tengo un hijo." Y me dice, "Creía que eras soltera, porque no me imagino a una mujer casada con tu trabajo."
La arqueóloga, ya jubilada, sigue sin embargo en activo como asesora . "Ahora estoy en Laguardia", nos cuenta. Durante estos años ha trabajado en infinidad de excavaciones en los Castros de Lastra, Astulez, Mariturri, Legardagutxi o el casco histórico de Vitoria. De hecho, Sáenz de Urturi fue la primera mujer que descubrió un tramo de la calzada romana más importante de la península, de la Iter 34, a su paso por Álava. "No sabía que estábamos pisando algo tan importante. Fue una verdadera sorpresa", nos cuenta recordando el día que lo localizaron.
Ella ha sido una de las siete mujeres o entidades homenajeadas por la Diputación Foral de Álava de cara al 8 de marzo. Este año, además, ese reconocimiento se ha ligado a un proyecto impulsado por la institución foral, por el que se ha buscado rescatar la presencia de las mujeres en nuestra historia a través de un trabajo titulado ‘Huellas de las mujeres alavesas en la historia-Arabako Emakumeen Aztarnak Historian’, y que ha llevado a cabo la cooperativa Errotik. Este proyecto se ha plasmado en una publicación, un cómic y diverso material audiovisual.
Más huellas
Son 7 en total las 'Laiak' de reconocimiento entregadas por la Diputación. Además de la aqueóloga han recibido galardones:
.-La historiadora de arte y filósofa, Isabel Mellén, que lleva años rescatando la memoria histórica de las mujeres en Álava y que ha recibido el reconocimiento correspondiente a otra de las ‘huellas’, la de las mujeres en los ritos de alumbramiento en Alaiza
.- Maria Ángeles Teso Fernández, de la Familia Martínez de Lagrán, que lleva generaciones haciéndose cargo de la ermita de San Pedro, en la Montaña Alavesa, ha sido reconocida por su labor en homenaje a las seroras, freilas y beatas
.- Garbiñe Astondoa, hija y nieta de Rosalía Ormaechea y María Trojaola, respectivamente, pertenecientes a un linaje de curanderas y parteras en Aramaio.
.- María Pilar Peciña Fernández, antigua alumna, vecina y amiga de la maestra republicana Teófila Villanueva Marcuello, ha sido la encargada de recoger el premio.
.- Rafaela Garrido Mas, llegada desde Aldeaquemada a Llodio en 1955, en busca de un futuro más prometedor en un entorno industrializado, recogió el reconocimiento a las trabajadoras del proceso de industrialización.
Las salineras
Por último, la presidenta de la Asociación socio-cultural ‘Salineras de Santa Ana’, Inés Alonso Martínez, en nombre de las salineras de Añana, ha recibido la reconocimiento que homenajea la sororidad de estas mujeres del Valle Salado. En 'Hoy por Hoy Vitoria' hemos hablado con Raquel Hernández, salinera de Añana, desempeñó el oficio durante 10 años. Hernández destaca la importancia del trabajo colectivo entre las mujeres del pueblo, señalando que la solidaridad y el apoyo mutuo han sido esenciales para la preservación de esta tradición. "Nos hemos unido mucho, todas las mujeres del valle, compartiendo actividades y luchando por mantener viva nuestra cultura", apunta. La salinera destaca cómo la Asociación de Salineras, a la que pertenece, ha sido fundamental para fortalecer el lazo entre las mujeres del valle.




