La Real se queda sin la final de Copa de manera muy cruel
El equipo txuri-urdin dice adiós a la Copa con todos los honores. Empata en el Santiago Bernabéu (4-4) en todo un partidazo, después de haber ganado en los 90 minutos, y sólo le elimina un gol de Rudiger en la prórroga.

La Real se queda sin la final de Copa de manera muy cruel
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Donostia-San Sebastián
Un gol de cabeza del alemán Antonio Rüdiger en el minuto 115 de la prórroga tras un saque de esquina clasificó al Real Madrid para la final de la Copa del Rey y eliminó a la Real Sociedad (4-4 en la vuelta y 5-4 en el global) en las semifinales de la competición copera. De sta manera, el equipo txuri-urdin dice adiós a la Copa con todos los honores. Empata en el Santiago Bernabéu (4-4) en todo un partidazo, después de haber ganado en los 90 minutos, y sólo le elimina un gol de Rudiger en la prórroga.
Marcó pronto Barrenetxea, pero empató antes del descanso Endrick. Y en la segunda parte, fue creciendo poco a poco hasta marcar dos goles seguidores que le ponían 1-3 a falta de diez minutos para el final. Y entonces el Real Madrid despertó de manera inexplicable para empatar el partido y dejarle fuera. Pero Oyarzabal, siempre aparece el capitán, metió con su cabeza de oro el 3-4 que llevaba el partido a la prórroga de manera inesperada e impresionante.
Nada que recriminar
No se les puede recriminar nada a los jugadores de la Real. Tampoco a Imanol. Nos hicieron creer de verdad en lo imposible. Nos hicieron soñar cuando nadie daba nada por la remontada. Fue una Real Sociedad que midió cada esfuerzo que hizo, que fue poco a poco en la primera parte, para dar un golpetazo tras el descanso y que nunca renunció a creer. Ni cuando todo parecía perdido después de dejar escapar al final el 1-3 a favor. Nunca bajó los brazos, siempre tuvo fe. La de su capitán, Oyarzabal, y su cabeza maravillosa. La de cada uno de los futbolistas txuri-urdin, que se dejaron el alma sobre el césped del Bernabéu. Lo dieron todo. Se vaciaron. Era lo único que les pedíamos. Para sentirnos plenamente orgullosos de ellos. Absolutamente.
Sin reservas. Las fuerzas dieron para lo que dieron. Pero es que ni eso. A la Real solo le sobró ese no sé qué que tiene el Madrid para alcanzar la final. Habrá que seguir insistiendo. No queda otra. Y con Imanol, por supuesto. ¡Renovación ya! Esta Real está muy viva. El Bernabéu lo ha confirmado. A pesar de quedarse sin final.
'Real Tertulia'
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