El puente de Salburua, afectado por el incendio por gas, tendrá que derribarse: "Es la única opción viable para garantizar la seguridad"
Los plazos preliminares estiman que la demolición empezaría en septiembre de 2027 y la nueva construcción, como pronto, estaría para abril de 2027
Vitoria-Gasteiz
El Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz derribará el puente del paseo de la Ilíada, afectado por el incendio del pasado 18 de marzo en el barrio de Salburua, tras la explosión de una tubería de gas, al "ser la única opción viable para garantizar la seguridad" y debido a "los importantes daños" que presenta su actual estructura.
Estado actual del puente de Salburua, de Vitoria, afectado por el incendio. / Ayuntamiento de Vitoria
Estado actual del puente de Salburua, de Vitoria, afectado por el incendio. / Ayuntamiento de Vitoria
Así lo ha trasladado en rueda de prensa la concejala de Espacio Público, Beatriz Artolazabal, con base en "los estudios técnicos" efectuados, que "certifican la necesidad de la demolición por razones de seguridad".
El informe técnico elaborado por el Departamento municipal de Espacio Público y Barrios determina que los daños estructurales ocasionados por el fuego son de tal magnitud que "la reparación no es viable" ya que, "aunque el colapso no es inminente, la redistribución de tensiones en la estructura genera un nivel de incertidumbre inaceptable desde el punto de vista de la seguridad".
Artolazabal ha subrayado que "la seguridad es la prioridad". "No podíamos correr ningún riesgo con una infraestructura tan dañada y la única opción viable es la demolición y construcción de un nuevo puente que garantice la estabilidad y funcionalidad necesarias para la ciudadanía", ha valorado.
La concejala ha explicado que el informe determina "desperfectos palpables" en las vigas, tableros, estribos y losas superiores del puente, por lo que "la demolición completa es la única opción viable".
La demolición, de cara a septiembre de 2026
El Ayuntamiento ha decidido llevar a cabo una licitación única que incluirá tanto la demolición del puente actual como la construcción de uno nuevo, con el objetivo de "agilizar los plazos y ofrecer una solución integral y definitiva para la zona". La inversión prevista para este proyecto supera el millón de euros, financiados mediante créditos de compromiso.
En cuanto a los plazos, aunque aún faltan informes hidrológicos y geológicos clave para la planificación final del proyecto, el Ayuntamiento estima que la duración total, incluida la redacción del proyecto, licitación y obras, estaría entre los 24 y 28 meses en total. Se estima que el inicio del derribo del puente se comience hacia septiembre de 2026 y su construcción terminaría, como pronto, en abril de 2027.
Artolazabal ha dicho que son "conscientes de las molestias que esta situación genera en la ciudadanía", pero ha asegurado que su departamento "está trabajando con la mayor diligencia posible para reducir los plazos, sin comprometer la seguridad ni la calidad del proyecto".
"El nuevo puente no solo sustituirá al dañado, sino que estará diseñado con los estándares más avanzados en materia de seguridad y funcionalidad", ha declarado.
Al respecto, además de garantizar la estabilidad estructural, se estudiará la mejor forma de reubicar las instalaciones de los servicios que discurrían bajo el puente dañado, como las redes de gas, electricidad, agua y recogida neumática de residuos, "asegurando su correcto funcionamiento en el futuro".
"La nueva estructura no solo resolverá el problema actual, sino que nos permitirá contar con un puente moderno y adaptado a las necesidades de nuestra ciudad", ha añadido la concejala.
Desde el suceso, el Consistorio ha procedido al cierre total del tráfico, tanto rodado como peatonal, en la infraestructura y ha reforzado la señalización en la zona, con el objetivo de "garantizar la seguridad vial".
En este sentido y, "siendo conscientes de que afecta a la circulación de la zona y genera molestias a los vecinos, se han introducido rutas alternativas para "minimizar el impacto".
A futuro inmediato, el Ayuntamiento plantea establecer una semaforización provisional en los dos cruces ubicados frente a la ikastola Errekabarri, para "garantizar la seguridad en el entorno escolar".
Asimismo, Tuvisa "ajustará los trazados" de las líneas 6 y 10 de autobuses urbanos que realizan la ruta de transporte público, con el objetivo de "mantener la conectividad de la zona".
En cuanto a la recogida neumática de residuos, también afectada por el incendio, volverá a estar operativa dentro de tres semanas, según indican fuentes del Ayuntamiento.
Por último, Artolazabal ha informado que las causas del incendio "siguen siendo investigadas por la Ertzaintza", por lo que, "de momento se desconoce el origen del fuego".
