La crisis arancelaria pone en alerta a la industria vasca: "La cadena de valor por el suministro de materias primas o proveedores se puede ver afectada"

Bilbao

En una semana clave para la industria vasca, con la reunión del Grupo para la Defensa Industrial y la celebración por parte del Gobierno vasco de un consejo de gobierno monotemático centrado en la crisis arancelaria, todas las miradas se dirigen a las pequeñas y medianas empresas, que constituyen el grueso del tejido empresarial de Bizkaia y Euskadi.

La preocupación se centra especialmente en sectores estratégicos como la siderurgia, la automoción y el vino, duramente golpeados por los nuevos aranceles. Alemania, principal destino de muchos productos vascos, se ha visto directamente afectada por el arancel del 25% impuesto por Estados Unidos a los vehículos, lo que ha paralizado inversiones en innovación, desarrollo y digitalización en muchas empresas del entorno. El país germano importa una de cada tres piezas fabricadas en Euskadi y solo el año pasado vendió casi un millón de coches al mercado estadounidense.

Empresariado pequeño y grande

Ante este contexto, la patronal Confebask ha reclamado ya ayudas urgentes para los sectores más afectados, como el siderometalúrgico, bienes de equipo o automoción. Pero, ¿cómo están reaccionando las pymes vascas?

Desde Bizkaia, empresas como TH Company, con sede en Mungia, aseguran estar atentas al nuevo panorama internacional, aunque por el momento no sienten un impacto directo. La compañía ha firmado recientemente un contrato con la principal compañía pesquera de Pekín para la renovación de sus equipos de cubierta. “Desde el año pasado que cerramos con ellos, a nosotros los aranceles no nos afectan directamente. Podrá haber impacto en la cadena de valor por el suministro de materias primas o proveedores, pero con Estados Unidos y Canadá nuestra exposición es limitada”, ha explicado Javier Sandino, adjunto a gerencia de la empresa.

Otras compañías como CAF Signalling, recién galardonada con el Premio a la Creación de Empresa Innovadora, destacan la diversificación como una de sus principales fortalezas. “Tenemos proyectos en Estados Unidos, donde contamos con una planta productiva. Eso nos da seguridad y tranquilidad en este entorno de incertidumbre. Sobre todo estamos a la espera de qué ocurre internacionalmente. Pero, estamos tranquilos, tenemos una cartera de clientes diversificada”, ha señalado Ion Irazábal, portavoz de la empresa.

Captación de talento

En lo que respecta a la captación de talento internacional, las empresas vascas reconocen dificultades para atraer profesionales desde países como Estados Unidos, debido a la diferencia salarial. “Siempre hay una problemática salarial. Traer gente de fuera y tratar de igualar las condiciones que ofrece una empresa estadounidense es un hándicap”, ha asegurado Alberto Pinedo, director de operaciones de Nemergent Solutions.

A pesar de todo, las pymes de Bizkaia aseguran seguir activas en el mercado internacional, captando proyectos en destinos tan diversos como Estados Unidos, México, Canadá o China. En paralelo, comienza a asomarse una reflexión colectiva sobre la necesidad de diversificar mercados con un foco creciente en Asia y Latinoamérica.