El Surne Bilbao Basket rozó otra gesta épica tras su título europeo, pero cayó en la prórroga ante UCAM Murcia
El conjunto murciano se llevó la victoria en el tiempo extra (80-83), el día que Miribilla celebraba el título de europeo de su equipo

Jaume Ponsarnau sostiene el torneo de la FIBA Europe Cup en los momentos previos al partido de Liga Endesa entre el Bilbao Basket y el UCAM Murcia / LUIS TEJIDO (EFE)

Bilbao
El Surne Bilbao Basket quiso extender la fiesta. Miribilla, teñido de negro y rebosante de orgullo tras el histórico título de la FIBA Europe Cup conquistado esta semana, soñaba con otra jornada mágica. Y durante varios minutos lo pareció. A pesar de ir 20 puntos abajo en el tercer cuarto, los hombres de negro sacaron el corazón de campeón para forzar una prórroga imposible, aunque la victoria final se escapó en los instantes decisivos ante un UCAM Murcia más templado (80-83).
El inicio fue una prolongación del éxtasis vivido el miércoles en Salónica. Con un alley-oop de Frey a Jones, el Bilbao Basket encendió la mecha de Miribilla, pero pronto se notó el desgaste físico y emocional acumulado. UCAM Murcia, más fresco y mentalizado, tomó el control apoyado en una defensa en zona que frenó el ímpetu local. Los de Sito Alonso encontraron la manera de imponer su ritmo, mientras los bilbaínos sufrían para atacar ordenadamente.
La fiesta europea parecía pesar en las piernas y en las cabezas. Los murcianos, liderados por el omnipresente Howard Sant-Roos y el poderío interior de Kostas Antetokounmpo, abrieron brecha hasta el 40-60, dejando el partido visto para sentencia al borde del último cuarto. El Bilbao Basket, con un 2/11 en triples al descanso, no encontraba la forma de romper la muralla universitaria.
Una remontada épica
Pero este equipo se ha acostumbrado a vivir al límite. Como en Tofas, como en Dijon, como en Salónica. Empujado por una grada que nunca dejó de creer, el Surne Bilbao Basket sacó fuerzas de donde no quedaban y convirtió el último cuarto en un ejercicio de fe absoluta. Muhammad-Ali Abdur-Rahkman, uno de los héroes de Salónica, lideró la reacción con puntos y coraje, secundado por Frey y Pantzar.
Punto a punto, defensa tras defensa, los de Jaume Ponsarnau limaron la desventaja. De los 15 puntos de diferencia a falta de ocho minutos se pasó a solo cinco con dos minutos por jugar (65-70). El UCAM Murcia entró en pánico y el Bilbao Basket olió sangre.
Con un triple milagroso de Frey desde la esquina a falta de apenas seis segundos, el marcador se igualó a 76 y el Bilbao Arena se vino abajo. La remontada de 20 puntos estaba culminada. La fiesta parecía total.
El desenlace más cruel
La prórroga fue una montaña rusa emocional. Pantzar adelantó a los hombres de negro (79-78), pero el cansancio pesaba ya demasiado. UCAM Murcia, más acertado en los tiros libres finales, se llevó el triunfo con dos aciertos de Sant-Roos que sentenciaron el 80-83.
Harald Frey, uno de los más destacados, tuvo dos opciones de triple para forzar una segunda prórroga, pero esta vez la épica no quiso aparecer. A pesar de la derrota, el Surne Bilbao Basket se fue ovacionado por su público, que reconoció el esfuerzo titánico de su equipo en una semana inolvidable.
La fiesta no pudo ser completa, pero si algo ha dejado claro el Surne Bilbao Basket es que el corazón de campeón que ha forjado en Europa no entiende de derrotas ni de límites.




