El día después del apagón: Gipuzkoa recobra la normalidad tras la mayor caída eléctrica en años

San Sebastián

La jornada avanza en aparente normalidad en Guipúzcoa, pero la resaca del gran apagón eléctrico de ayer todavía se deja sentir. Desde primeras horas de esta mañana, los servicios de Cercanías y Media Distancia de Renfe han sido los últimos en incorporarse a la rutina, restablecidos poco después de las 9. El transporte público, los semáforos, los comercios y hasta los trámites administrativos comienzan a funcionar con cierta fluidez, aunque las secuelas de la interrupción eléctrica más grave en años siguen presentes tanto en infraestructuras como en la ciudadanía.

Martín Ibabe, concejal de Seguridad Ciudadana de San Sebastián, ha ofrecido una imagen de calma tras 24 horas del suceso: “Ahora mismo es una foto de normalidad, pero ayer a esta misma hora fue complicado. Tuvimos que reaccionar con rapidez, especialmente ante la caída de todo el sistema de movilidad y comunicaciones”. El edil ha destacado que “en menos de una hora se había recuperado en gran parte el suministro eléctrico, lo que ayudó a que no se produjeran incidentes graves”.

Emergencias y rescates: 42 actuaciones en Donostia

Durante el corte eléctrico, los bomberos y servicios municipales realizaron un total de 42 intervenciones en la capital guipuzcoana, 32 de ellas por personas atrapadas en ascensores. Una de las más delicadas ocurrió en el funicular público del barrio de Morlans, donde “hubo que romper un cristal para evacuar a una persona que se encontraba indispuesta”, según confirmó Irune Berasaluze, portavoz foral. Además, “se atendieron dos alertas de humo por generadores y varios portes de personas mayores con movilidad reducida”.

Berasaluze también informó de que “el servicio foral funciona ya con total normalidad, aunque ayer se suspendieron citas relacionadas con la campaña de la renta en casi todas las oficinas. Por suerte, ya han sido reprogramadas para hoy o los próximos días”.

Hernani, clave en la reconexión de la red eléctrica

Uno de los factores que permitió que Guipúzcoa recuperara la luz antes que otras comunidades fue la rápida intervención de la subestación eléctrica de Hernani, un nodo estratégico del sistema energético vasco. La ingeniera eléctrica Itziar Zubia explicó que “la red española está interconectada con Francia, y en este caso, al perder conexión con las centrales, se decidió reiniciar la red desde los puntos fronterizos. La subestación de Hernani permitió ese primer impulso eléctrico necesario”.

Zubia añadió que “no estamos preparados para apagones de cero absoluto. Aunque hay protocolos para incidentes menores, este tipo de situaciones obliga a revisar nuestras vulnerabilidades y aprender para el futuro”.

¿Qué pueden hacer los consumidores afectados?

Muchos ciudadanos se preguntan ahora si tienen derecho a reclamar por alimentos perdidos, electrodomésticos dañados o billetes duplicados, especialmente en el caso de quienes tuvieron que volver a adquirir billetes de tren.

Irune Berasaluze aclaró que “aunque todavía no se conocen las causas exactas del apagón, lo primero que deben hacer los afectados es recopilar toda la documentación: facturas, tickets, capturas de pantalla. También se recomienda obtener un informe técnico si algún aparato se ha dañado”. Subrayó que “no hay un plazo fijo para reclamar hasta que se determine si la causa fue de fuerza mayor. Si no lo fue, se abre la puerta a reclamaciones directas a seguros o compañías eléctricas”.

Coordinación institucional y balance positivo

El alcalde de San Sebastián, Eneko Goia, ha valorado positivamente la respuesta de los servicios públicos y la ciudadanía: “Lo vivido fue un reto importante para la ciudad, pero gracias al civismo y la rápida coordinación de todos los cuerpos, se pudo afrontar con eficacia. Nuestro sistema, aunque puesto a prueba, respondió con solidez”.

Goia destacó que se reforzaron servicios como movilidad y bomberos en cuanto se percibió la magnitud del corte, y añadió que “este incidente debe servir para reforzar nuestras infraestructuras críticas y acelerar proyectos como nuevas subestaciones o sistemas de respaldo energético”.

Una llamada a la resiliencia energética

Markel Etxeberria, portavoz de Red Eléctrica en Euskadi, explicó que “el apagón ha puesto en evidencia la necesidad de redundancias más robustas en la red del norte. La red funcionó como debía, aislando las zonas afectadas, pero el arranque es complejo si se cae toda la generación en bloque”. También apuntó que “la futura subestación de Lumino Vaso en Amorebieta ayudará a evitar situaciones similares, sobre todo con la llegada del tren de alta velocidad”.

Conclusión: Un aviso y una oportunidad

El apagón de Guipúzcoa ha sido un test de estrés real para infraestructuras, servicios y ciudadanía. Si bien no se produjeron daños graves, el evento ha revelado puntos débiles clave en el sistema de suministro y comunicaciones. Como señaló Martín Ibabe: “De estas situaciones lo primero que hay que hacer es aprender”. Y la lección parece clara: la resiliencia energética ya no es opcional, es una necesidad.