San Sebastián aprueba un plan especial para preservar la Parte Vieja y el Puerto

San Sebastián

El Ayuntamiento de San Sebastián ha aprobado inicialmente un nuevo Plan Especial de Protección para la Parte Vieja y el Puerto, con el objetivo de preservar su valor patrimonial, reforzar su carácter residencial y ordenar sus usos frente a la presión turística. El alcalde, Eneko Goia, ha anunciado este martes en rueda de prensa que el documento sustituye al vigente desde 1995 y que se adapta a la declaración de Conjunto Monumental realizada por el Gobierno Vasco en 2019.

El nuevo planeamiento, que deberá superar ahora un proceso de tramitación de aproximadamente un año, regula tanto la conservación arquitectónica como los usos del espacio público. “Es un instrumento clave que protege el patrimonio sin perder de vista la vida cotidiana de quienes residen en la zona”, ha afirmado Goia, acompañado por la concejala de Planificación Urbanística y Vivienda, Nekane Arzallus.

Entre las principales medidas destaca la consolidación del tejido urbano, lo que implica que no se permitirá aumentar la edificabilidad ni construir nuevas alturas. También se reconocen equipamientos como las escuelas de Urgull, independientemente de su valor estético, por su utilidad para la comunidad.

En materia de vivienda, el plan facilita reformas interiores, instalación de ascensores, mejoras en el aislamiento acústico y en la prevención de incendios. Asimismo, se impulsa la sustitución de cubiertas planas por inclinadas y la retirada progresiva de cableados, toldos y ventilaciones visibles en las fachadas.

Respecto al uso del espacio público, se establece que no se podrá cubrir la plaza de la Trinidad, mientras que sí se permite techado en la zona infantil de la plaza de San Telmo. En movilidad, se descarta de forma definitiva la posibilidad de que un futuro aparcamiento subterráneo en el muelle tenga acceso por la calle Ijentea.

El plan también pone freno al crecimiento de la actividad hostelera, impide el acceso a bares y comercios por portales residenciales y regula la instalación de toldos. Además, mejora la operatividad de los servicios de emergencias en la zona.

Finalmente, aborda la situación de los edificios en ruinas de los números 6 y 7 del muelle, para los que se propone una ordenación consensuada con el Gobierno Vasco y sus propietarios. Con esta aprobación inicial, se abre ahora un periodo de alegaciones antes de su exposición pública y validación definitiva.

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