"¿Cómo se puede gestionar tan mal una plantilla?" La afición del Athletic estalla antes del duelo en Old Trafford
Las bajas de Nico, Iñaki Williams y Sancet desatan las críticas contra Valverde y el cuerpo técnico por lo que muchos consideran una gestión nefasta en el momento clave de la temporada

MARK RUNNACLES (EFE)

El Athletic Club viaja a Manchester para enfrentarse al Manchester United en la vuelta de la eliminatoria más importante del curso, pero lo hace sin tres de sus figuras más relevantes: Nico Williams, Iñaki Williams y Oihan Sancet, todos ellos fuera de la convocatoria por molestias físicas. A esta lista de ausencias se suma la baja por sanción de Dani Vivian. La noticia, confirmada por el club a través de sus canales oficiales, ha provocado una reacción inmediata y airada de una gran parte de la afición rojiblanca.
Las redes sociales, especialmente bajo la publicación de la convocatoria en la cuenta oficial del club, se han llenado de mensajes que expresan frustración, enfado y decepción. Los seguidores del Athletic no sólo lamentan la pérdida de talento para el encuentro más decisivo del año, sino que muchos señalan directamente a Ernesto Valverde y a la dirección deportiva por lo que consideran una mala planificación física y una gestión errónea de los esfuerzos durante la temporada.
“Estoy hasta los cojones de las putas estrellitas, encima luego cuando os toca demostrar no hacéis nada”, estallaba @0ieer, en un mensaje dirigido directamente a los tres jugadores ausentes. Lejos de tratarse de un caso aislado, su tono resume el sentir de buena parte de la afición.
"Nos quedamos mejor en Bilbao"
“¿Y si nos quedamos mejor en Bilbao? ¿Para qué ir a Manchester?”, escribía con evidente ironía el usuario @borja_ibanez. Su mensaje no es sólo una muestra de resignación, sino también de incredulidad ante la falta de respuesta del club a la situación crítica.
Las críticas apuntan a varios frentes. En primer lugar, a la gestión de minutos de los jugadores clave, quienes, según los aficionados, han llegado al tramo decisivo del curso sobrecargados y sin posibilidad de recuperación. En segundo lugar, a la política de rotaciones, prácticamente inexistente en muchas fases de la temporada. Y, en tercer lugar, a la narrativa institucional que ha sostenido la ilusión de la “remontada” en Old Trafford pese a que, desde dentro, ya se conocían las complicaciones físicas de varios de los futbolistas más determinantes.
En la misma línea, @Lonsismoo ironizaba con la previsión del once que podría alinear el técnico: “¿Maroan, Berenguer, Unai Gómez y Djalo?”.
Apoyo, a pesar de todo
Aunque algunos aficionados optan por mantener el tono de apoyo y esperanza, como @javielmuniz que animaba con un “Pues con estos leones vamos a por ellos, Aurrera Athletic!!!”, la mayoría de los comentarios destilan una sensación de haber sido engañados. La frustración no se dirige tanto a los jugadores en sí como a la falta de transparencia del club y la gestión deportiva en las semanas previas al choque.
Otro aficionado, @Bio2lnd, trataba de encontrar un punto de humor en el caos con un mensaje sarcástico: “Como asaltemos esa bazofia de Old Trafford con el Baskonia me vuelvo loco y puede que me veáis por Piccadilly Gardens corriendo en pelotas. Confianza plena en los katxorros”. Una ironía que encierra la falta de fe en que los suplentes puedan hacer frente a un reto de tal envergadura.
La indignación se ha visto acentuada por la ausencia de explicaciones claras. El club ha hablado de “molestias físicas”, pero sin detallar la gravedad o el alcance de las lesiones, alimentando las sospechas de que las decisiones han sido precipitadas o mal comunicadas. En ningún caso se ha planteado que las ausencias fueran una estrategia o una decisión consensuada, lo que agrava aún más la percepción de improvisación.
Precedentes recientes
Además, los precedentes recientes tampoco ayudan. Las eliminaciones tempranas en Copa, la irregularidad en Liga y la falta de peso competitivo en los partidos clave han generado una sensación de estancamiento. La oportunidad de hacer historia en Old Trafford había renovado las esperanzas de una temporada que, por momentos, parecía condenada a la mediocridad. Pero el golpe de realidad ha sido duro: la remontada prometida se tendrá que intentar sin alma, sin velocidad, sin creación.
Muchos seguidores sienten que el club les ha vendido una ilusión sin fundamento. “Nos prometieron una noche histórica en Old Trafford y viajamos sin alma”, escribía uno de los comentarios más compartidos en las últimas horas.
La noche de Manchester puede convertirse en una fecha inolvidable o en la confirmación de una crisis de gestión profunda. Más allá del resultado, el vínculo entre club y afición ha quedado visiblemente dañado. Lo que está en juego ya no es solo el pase de ronda, sino la confianza en un proyecto que ha demostrado no saber gestionar su momento más crucial.




