¿Qué pasará con las matrículas del colegio Jesús María? “Estamos en el limbo”, denuncian las familias tras la ruptura del acuerdo con Jesuitinas

La noticia llegó como un jarro de agua fría. La Fundación Educativa Jesuitinas anunció este martes que rompía unilateralmente el acuerdo de fusión con el colegio Jesús María de Bilbao, un proyecto que había generado ilusión, esperanza y también dudas. El plan conjunto iba a dar lugar al nuevo centro Zabalbide Ikastetxea a partir del próximo curso 2025-2026, pero ahora ha quedado reducido a papel mojado.

Las consecuencias no se han hecho esperar. Docenas de familias, que ya habían iniciado los trámites de matrícula confiando en la nueva oferta educativa, se sienten ahora desorientadas. Algunas incluso habían solicitado plaza en otros centros por temor a la falta de información, y otras muchas esperaban poder formar parte del nuevo colegio conjunto. Ahora, ese colegio no existe.

“El colegio Zabalbide no existe. Y nuestros hijos, tampoco sabemos dónde están matriculados”

En conversación con Radio Bilbao, el presidente del AMPA de Jesús María no oculta su preocupación: “Los que apostamos por el proyecto común estamos en el limbo. No sabemos en qué situación están nuestras hijas e hijos para el curso que viene”.

Con voz entrecortada, explicaba que la falta de información y la incertidumbre están generando auténtico pánico entre las familias: “No sabemos si ahora tenemos derecho a elegir centro, ni si se nos va a recolocar automáticamente. No hay ninguna confirmación oficial”.

Y es que, como él mismo destaca, hay alumnos que están en cursos clave, como Bachillerato, donde una mudanza de centro puede afectar gravemente su rendimiento, sus notas y su futuro académico.

Huelgas, despidos y un proyecto herido desde el inicio

La ruptura llega en un contexto ya complicado. Los trabajadores de ambos centros llevaban semanas en huelga, protestando por los 44 despidos que iba a suponer la fusión. La Fundación Educativa Jesuitinas ha justificado su decisión aludiendo a tres causas: la baja matrícula, la inviabilidad económica y un clima social poco favorable.

Desde Jesús María, sin embargo, consideran “injustificadas” esas razones, y apuntan a que el acuerdo pretendía precisamente garantizar el futuro del alumnado y del profesorado. Ahora, esa estabilidad se ha vuelto inalcanzable.

“Nos hemos quedado fuera de un proyecto por el que apostamos con confianza”

“El problema es que se ha roto el acuerdo sin previo aviso, sin transparencia y sin un plan alternativo claro”, denuncian desde el AMPA. “Nos hemos quedado fuera de un proyecto en el que confiamos y no sabemos si en julio nos dirán que tenemos que buscar otro centro”.

La situación ha obligado al Departamento de Educación del Gobierno Vasco a iniciar contactos para recolocar a algunos alumnos en otros colegios, pero no se ha comunicado aún una solución definitiva para todos.

Una comunidad escolar que exige respuestas

Las familias no solo piden explicaciones. Piden certezas. Un camino claro. Un compromiso por parte de las instituciones educativas para garantizar que sus hijas e hijos no queden atrapados en una tormenta administrativa.

“No nos merecemos esto. Y, desde luego, nuestros hijos tampoco”, concluye el presidente del AMPA.

Mientras Jesuitinas seguirá funcionando como centro independiente, el futuro de Jesús María permanece en el aire. Las decisiones se siguen valorando internamente, según la Fundación Bidaide, pero el tiempo corre, y el curso escolar no espera.