"¿Cómo que ocupación irregular? Llevamos 60 años aquí y todo el mundo lo sabe”, declaraciones de Jon Serrano, vecino afectado de Escalerillas

San Sebastián

El próximo 30 de junio es la fecha marcada para la primera vista del juicio por el que seis familias del barrio de Escalerillas, en Pasai Antxo (Gipuzkoa), podrían ser desahuciadas de las viviendas que han habitado durante décadas. El motivo: la construcción de una nueva vía ferroviaria de acceso al puerto. Las otras tres familias afectadas aún no han recibido una demanda formal, pero se encuentran en la misma situación.

Jon Serrano, uno de los vecinos, denuncia que “llevamos 60 años aquí y ahora nos dicen que somos ocupas. Hacienda sabe que estamos aquí, Iberdrola también, el ayuntamiento igual. Todo el mundo lo sabe”.

Según relatan los vecinos, muchas de las personas que viven actualmente en esas casas son viudas de antiguos trabajadores del puerto y sus hijos, quienes han cuidado de ellos hasta su fallecimiento. “Estas viviendas las construyó el puerto por fuera, pero por dentro las hicimos nosotros, albañiles, fontaneros, bomberos del propio puerto, que no llegaban a fin de mes con 700 pesetas de alquiler”, explica Serrano. “Nos ofrecieron comprarlas, pero nunca llegó a materializarse por trámites con Madrid que nunca se resolvieron”.

El Puerto de Pasaia ha iniciado acciones legales por supuesta usurpación, pese a que durante décadas —según los vecinos— conocía y aceptaba la situación. Kepa Oyarzabal, del Sindicato Socialista de Vivienda, afirma que la actitud del puerto ha sido "una constante acción mezquina, desinformando a los vecinos y con una voluntad clara de dividirlos y debilitarlos”.

Algunas viudas han recibido ofertas económicas condicionadas por su edad, mientras que a los hijos e hijas de los antiguos inquilinos no se les ha ofrecido nada. La única alternativa planteada ha sido trasladarlos a unas viviendas en San Juan, también del puerto, actualmente habitadas por otras personas. “Nos quieren meter en casas donde vive otra gente, para echarlos a ellos y meternos a nosotros. Eso no es solución”, denuncia Serrano.

El sindicato y los vecinos denuncian que el proyecto ferroviario, presupuestado en más de 7 millones de euros, beneficiará a una única empresa privada —Algeposa—, y que no se han ofrecido planes alternativos ni soluciones habitacionales reales. “No pedimos un piso de 500.000 euros, pedimos una solución justa. Muchos seguimos trabajando en el puerto. ¿Qué menos que darnos una alternativa digna?”, concluyen.

En medio de una crisis general de acceso a la vivienda, con precios disparados y cada vez más casas vacías, los vecinos de Escalerillas siguen en lucha. Con el apoyo del sindicato, han organizado manifestaciones, pancartas y actividades para visibilizar su situación. "Si no fuera por el sindicato, ya estaríamos en la calle", reconocen.

Mientras tanto, la reunión con la nueva presidenta del Puerto, prevista para esta semana, ha sido suspendida a última hora. “Si eso es la importancia que le dan a nuestras vidas, ya lo dice todo”, zanja Serrano.