Hondarribia diseña su futuro: más vivienda pública, límites al turismo residencial y protección del entorno natural
El Ayuntamiento presenta un nuevo Plan General de Ordenación Urbana que prioriza la vivienda asequible, regula los pisos turísticos y descarta urbanizar zonas naturales

“Hondarribia es mi ciudad, pero tuve que irme a Irun por no poder permitirme una vivienda”, ha confesado el alcalde Igor Enparan en una entrevista en Radio Irun, en la que ha explicado los ejes principales del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). El documento, que se somete a votación mañana jueves en el pleno municipal, busca responder a uno de los grandes retos de la ciudad.
Según el alcalde, uno de cada tres hondarribitarras de entre 30 y 45 años se ha visto obligado a marcharse de la localidad. Para frenar esta tendencia, el nuevo plan obliga a las promotoras a ceder parte de las nuevas viviendas al Ayuntamiento, en lugar de pagar por evitar la construcción de vivienda protegida. “Lo que necesitamos no es dinero, sino viviendas. Estamos firmando convenios con promotoras para que nos entreguen directamente pisos que pasarán al parque público”, ha explicado.
En función del tipo de suelo, entre un 20% y un 75% de las nuevas promociones deberán destinarse a vivienda pública. El objetivo es crear un parque municipal que permita ofrecer alquiler asequible, proyectos cooperativos o residencias para mayores.
El plan incluye restricciones importantes a los pisos turísticos, que solo podrán instalarse en primera planta (uno por edificio) y no en inmuebles con estructura de madera. En edificios de más de siete plantas podrá haber dos, pero siempre en primeras alturas. Las comunidades de vecinos podrán vetar este uso, como permite la normativa vasca.
En Zaldunborda se descarta el proyecto de un gran outlet comercial de 38.000 m². En su lugar, el plan permite solo 15.000 m² para actividades económicas concretas y reserva al Ayuntamiento la capacidad de decidir los usos futuros de ese suelo.
El nuevo Plan General aspira a frenar la expulsión de residentes, recuperar población joven, proteger el entorno natural y garantizar el derecho a la vivienda. “Queremos una Hondarribia viva, con barrios habitados y accesibles. Y eso se construye desde el urbanismo”, ha concluido el alcalde de Hondarribia Igor Enparan.




