Sociedad

Bizkaia aprueba el subfluvial: una infraestructura estratégica que conectará Artaza y Ballonti en solo cuatro minutos

La obra, que comenzará en la primera mitad de 2026, supondrá una inversión de más de 543 millones de euros y aliviará la presión sobre Rontegi, La Avanzada y la A-8

Bizkaia aprueba el subfluvial: una infraestructura estratégica que conectará Artaza y Ballonti en solo cuatro minutos

El Consejo de Gobierno de la Diputación Foral de Bizkaia ha dado luz verde al proyecto constructivo del túnel bajo la ría, una infraestructura que conectará Leioa (Artatza) y Portugalete (Ballonti) mediante un túnel de doble tubo y 3,2 kilómetros de longitud. Permitirá recorrer la distancia entre ambos puntos en solo cuatro minutos, frente a los 15 minutos que lleva actualmente.

Durante la presentación, la diputada general de Bizkaia, Elixabete Etxanobe, ha señalado que “el túnel bajo la ría no es ningún capricho ni ninguna ocurrencia, es una necesidad”. También ha destacado el carácter estratégico del proyecto: “Es una infraestructura ambiciosa, necesaria y absolutamente transformadora”.

La obra tendrá un presupuesto de 543 millones de euros y comenzará en la primera mitad de 2026, con un plazo estimado de ejecución de algo más de seis años. Etxanobe ha subrayado que el túnel responde a una necesidad real del territorio: “Rontegi ha llegado ya a su límite. Lo saben bien porque lo padecen las decenas de miles de personas que lo atraviesan a diario”.

El diputado foral de Infraestructuras y Desarrollo Territorial, Carlos Alzaga, ha incidido en la envergadura técnica del proyecto: “El proyecto en sí corresponde a la magnitud de la obra. La intervención de ingenierías, y diría, de primer orden mundial. Aunque sean vizcaínas, son de primer orden mundial”.

Sobre los aspectos técnicos, Alzaga ha señalado que la seguridad ha sido uno de los ejes fundamentales: “El tema de seguridad en nuestro túnel es muy preocupante”. Ha recordado que “muchos nos acordaremos del año 99, en el túnel de Montblanc, que hubo un incendio que murieron más de 30 personas y cambió el paradigma de la seguridad de los túneles”.

Impacto ambiental y vecinal

Alzaga ha señalado que desde el inicio del proyecto se han adoptado medidas para reducir al máximo las molestias durante las obras. “Uno de los elementos críticos al hablar de estos diseños es cómo hacer que esta obra, durante su ejecución, tenga el mínimo impacto ambiental”, ha explicado, precisando que al hablar de impacto ambiental no se refiere solo a especies vulnerables como la Linaria supina o el pez espinoso, presentes en este proyecto, sino también al efecto directo sobre las personas.

El proyecto aplica desde su fase inicial las recomendaciones de la Declaración de Impacto Ambiental, incorporando medidas como pantallas fonoabsorbentes, asfaltado silencioso, horarios limitados, limpieza de caminos y rutas de transporte planificadas para minimizar molestias. “Se van a instalar pantallas acústicas que son muy importantes”, ha confirmado Alzaga, quien además ha destacado que el presupuesto contempla incluso el cambio de ventanas en viviendas y colegios cercanos, así como un sistema de control en tiempo real del ruido y la calidad del aire.

Las zonas afectadas por las obras serán restauradas y revegetadas, incluyendo la recuperación del tramo urbano del arroyo. El parque de Artaza, afectado temporalmente, será rehabilitado al finalizar los trabajos con mejoras como nuevos senderos peatonales, una pista pumptrack y un estanque para anfibios con valor ecológico y didáctico.

El diputado foral ha subrayado que el túnel no generará un nuevo problema, sino que contribuirá a solucionarlo. “Alguien que tenga que ir de Urduliz al puerto de Bilbao va a hacer menos kilómetros”, ha explicado, lo que implica menos emisiones de gases de efecto invernadero, menor consumo de combustible, menos tiempo de desplazamiento y, además, una reducción en la siniestralidad, lo que se traduce en un beneficio directo para la ciudadanía.