Nico Williams, ausente en el primer entrenamiento del Athletic a puerta abierta
El menor de los Williams no se ha ejercitado con sus compañeros cuando le esperaban cientos de aficionados en las gradas del campo 2 de Lezama

Los jugadores del Athletic Club, durante el entrenamiento a puerta abierta de este jueves

Más de un año después, Lezama volvió a abrir sus puertas a la afición para vivir en directo un entrenamiento del Athletic Club. Y el regreso no defraudó: unas 2.500 personas abarrotaron el Campo 2 desde primera hora de la mañana para animar a los leones y acompañarlos en la recta final de la pretemporada.
Sin embargo, la jornada también tuvo un gran ausente: Nico Williams. El jugador más esperado por la chavalería no apareció sobre el césped. Su baja fue la principal novedad en una sesión marcada por el ambiente festivo, pero también por el silencio oficial respecto al motivo de su ausencia.
Nico, entre el silencio y la cautela
Nico Williams ha sido uno de los nombres propios del verano. Protagonista de múltiples rumores sobre una posible salida, finalmente renovó con el Athletic a largo plazo, en una operación estratégica para el club y de fuerte valor simbólico. Con su continuidad asegurada, era uno de los grandes reclamos para este regreso de la afición a Lezama.
Pero no estuvo. El club no ha ofrecido explicaciones oficiales sobre su ausencia, aunque se apunta a un plan específico de trabajo que podría estar relacionado con las molestias por pubalgia que arrastró durante el pasado curso. En un entorno en el que el más mínimo gesto puede desatar especulaciones, el Athletic optó por la discreción.
La decisión de que la sesión fuera a puerta cerrada en días anteriores —y solo se abriera este jueves— responde según el club a las obras de acondicionamiento del campo 2 de Lezama que es el que dispone de gradas.
Sin distracciones
La decisión de no dar explicaciones sobre Nico puede interpretarse también como una forma de evitar alimentar rumores innecesarios y comentarios incómodos. El jugador es clave en el proyecto y, tras su renovación, el club prefiere preservar su entorno y evitar distracciones. Consciente de su impacto mediático y del revuelo que puede generar cualquier movimiento suyo, el Athletic opta por la cautela.
Un entrenamiento muy esperado
El acceso se abrió antes de las 10:30, y ya había largas colas. Pancartas, camisetas rojiblancas, niños cargados de ilusión y hasta quien llevaba el himno del Athletic como banda sonora. El club justificó que hasta ahora no se hubieran abierto sesiones al público por las tareas de resiembra en los campos principales, pero el regreso fue a lo grande.
Durante hora y media, los leones se ejercitaron ante los vítores de una grada entregada. Iñaki Williams, Vivian y Muniain se llevaron buena parte de los aplausos. Pero en muchos de los cánticos y pancartas aparecía el nombre de Nico. Su ausencia no pasó desapercibida.
Otras ausencias
Además de Nico, tampoco se entrenaron con el grupo ni Egiluz (recién operado del cruzado), Yeray (suspendido por la UEFA), Prados, Sancet y Paredes (todos con molestias musculares). Valverde contó con 24 futbolistas en total y trabaja ya con la vista puesta en el último amistoso del verano, el sábado ante el Arsenal en Londres.
La sesión, pese a las bajas, transcurrió con normalidad. Valverde mantuvo un ritmo alto de trabajo, combinando tareas físicas con ejercicios tácticos. El ambiente, festivo pero exigente, dejó claro que el equipo quiere llegar en condiciones óptimas al arranque liguero.




