Ola de calor en Euskadi: aviso rojo por temperaturas de hasta 40 grados y recomendaciones de salud

La ola de calor que está afectando a gran parte de España desde el pasado 3 de agosto continúa su intensidad en Euskadi, donde la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha declarado el aviso rojo —el nivel más alto— para amplias zonas del interior de Bizkaia y Gipuzkoa. En estas áreas, los termómetros pueden superar los 40 grados, lo que representa un riesgo extremo para la salud y obliga a activar planes de emergencia y medidas preventivas. Álava, por su parte, se encuentra bajo aviso naranja, indicando un riesgo importante pero menor que el rojo.

Este episodio térmico, uno de los más fuertes de los últimos años, ha llevado a las autoridades a recomendar máxima cautela, especialmente durante las horas centrales del día cuando el calor alcanza su pico. La acumulación de altas temperaturas durante varios días seguidos agrava los efectos sobre la población y los sistemas de salud.

Medidas y recomendaciones

El Departamento de Salud del Gobierno Vasco ha insistido en la importancia de extremar las precauciones durante este período crítico. Se hace un llamamiento especial a la población más vulnerable: niños menores de cuatro años, personas mayores, embarazadas y pacientes con enfermedades crónicas. Además, quienes desarrollen actividades físicas en exteriores deben extremar las medidas para evitar golpes de calor o deshidratación.

Entre las recomendaciones, Salud recalca la necesidad de mantenerse bien hidratados, evitar la exposición directa al sol durante las horas de mayor calor y buscar espacios frescos o climatizados. También insiste en la importancia de no dejar a nadie dentro de vehículos estacionados y cerrados, dada la rápida elevación de la temperatura interior que puede tener consecuencias fatales. Asimismo, se recomienda contactar frecuentemente con personas mayores que vivan solas para asegurarse de que estén bien y no presenten síntomas de agotamiento o malestar.

Impacto en la atención sanitaria

Los efectos de estas temperaturas extremas ya se han dejado notar. Ayer, los servicios de emergencia de Osakidetza atendieron a quince personas afectadas por el calor, principalmente casos de agotamiento, golpes de calor y deshidratación.