El director del aeropuerto de Bilbao confía en consolidar el vuelo directo a Nueva York
Tras estrenar el vuelo a Nueva York, Iván Grande se marca como próximos objetivos la apertura de nuevas rutas transoceánicas hacia Boston y Miami


Bilbao
El aeropuerto de Bilbao encara el final del verano con cifras históricas. Tras batir en 2024 su récord anual con 6,77 millones de viajeros, este 2025 avanza en la misma dirección. En el acumulado hasta finales de agosto, la terminal de Loiu suma casi cuatro millones de pasajeros, lo que supone un crecimiento del 3,6% respecto a 2024.
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El director del aeropuerto, Iván Grande, ha destacado en 'Hoy por Hoy Bilbao-Bizkaia' dos hitos que han marcado el año: la final de la UEFA Europa League en San Mamés, que supuso un operativo inédito con hasta 16 aeronaves por hora, y el primer vuelo transoceánico directo a Nueva York, operado por United Airlines.
Grande ha dejado entrever que confía en que la conexión con Nueva York se consolide y pueda prolongarse más allá del verano. Y, aunque lo califica como un sueño, no oculta sus aspiraciones: “una vez que ya tenemos Nueva York, ¿por qué no pensar en Boston o Miami?".


Obras en la terminal y parking
En paralelo, el aeropuerto avanza en la mejora de sus infraestructuras. En los últimos años se han habilitado 240 plazas para empleados con la construcción del bloque técnico y otras 400 en el parking de bajo coste P4. Ahora, el gran salto llega con la ampliación del aparcamiento general P1, que va a añadir 700 nuevas plazas. Las obras obras arrancaran a finales de año y se prolongarán durante 18 meses, con lo que se espera que estén finalizadas para verano de 2027.
Además, Aena ha puesto en marcha el proceso para ampliar tanto la terminal como la plataforma de estacionamiento de aeronaves. Por ahora, los trabajos se encuentran en la fase inicial de estudio funcional, el documento que servirá "de base al futuro proyecto constructivo". Este análisis definirá cuestiones clave como los metros cuadrados necesarios en la zona de embarque, el número de pasarelas, la capacidad de filtros de seguridad, la oferta de restauración o la reorganización de aparcamientos. Grande no se ha aventurado aún a dar cifras de presupuesto ni plazos concretos, pero sí ha recalcado que se tratará de “una ampliación absolutamente potente” y que deberá superar trámites complejos: desde la licitación y el diseño arquitectónico hasta los estudios de impacto ambiental y la supervisión de organismos como la Agencia Estatal de Seguridad Aérea o la Dirección General de Aviación Civil.




