“Álava hechiza: es un territorio que hay que descubrir con los cinco sentidos”
La revista de viajes National Geographic pone en valor Álava con el cuadernillo especial “Álava, patrimonio natural y de gastronomía en un viaje que hechiza”

Ser Viajeros: National Geographic nos redescubre Álava, un territorio que hechiza
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Vitoria-Gasteiz
Que Álava es mucho más que Vitoria es algo que ya nadie discute, pero pocos imaginan la cantidad de joyas que esconden sus siete cuadrilla: La Llanada, Añana, Montaña Alavesa, Aiaraldea, Rioja Alavesa, Gorbeialdea y Vitoria-Gasteiz. Rincones donde la naturaleza, la historia y la gastronomía se mezclan con un encanto difícil de explicar, y que la prestigiosa revista de viajes National Geographic lo ha intentado, redescubriendo esos rincones poco conocidos, lejos de los focos de las redes sociales.
Un cuadernillo de 35 páginas bajo el título “Álava, patrimonio natural y de gastronomía en un viaje que hechiza”. Una publicación que demuestra que no hace falta irse lejos para vivir aventuras con alma. “El cuadernillo está tanto en impresión como en versión digital, y lo que hemos hecho ha sido ensanchar la provincia a unos límites que incluso a nosotros nos han sorprendido”, ha indicado el director de viajes de National Geographic, Javier Zori. “Es un territorio donde todavía es difícil sentirse turista, y eso lo hace único. Aquí la gente vive el lugar de una forma muy sana, muy auténtica”, ha destacado, como uno de los puntos clave que hacen de Álava uno de esos puntos indispensables a visitar.
Una guía no sólo para los visitantes que marquen Álava como ese lugar mágico que visitar, sino para los propios alaveses y alavesas, que a buen seguro, van a redescubrir rincones y lugares en cada una de las cuadrillas.
Entre los descubrimientos que más le han enamorado está la ruta del Txakolí de Aiaraldea, sólo a 20 kilómetros de Bilbao y 35 de la capital alavesa. “Tiene un paisaje espectacular y un encanto natural que engancha. Aunque Rioja Alavesa se lleva los focos, el Txakolí alavés tiene una personalidad propia que merece mucha más atención”, ha reconocido el director de viajes de National Geographic.
De las salinas a los dólmenes: viaje por una Álava con alma
La ruta arranca en Añana, con su paisaje salinero, en proceso de revalorización y rehabilitación. “Es un espacio único y un ejemplo de cómo recuperar el patrimonio con mimo”, ha destacado Zori. Pero el viaje no se queda ahí, ya que la cuadrilla de Añana también cuenta con el desfiladero y las cascadas del río Purón y la Torre de los Varona, que completan una cuadrilla que respira historia y naturaleza a partes iguales.
En Rioja Alavesa, la cosa va más allá del vino "aunque un buen crianza nunca sobra", como recomiendo un Zori, que a su vez recomienda darse un paseo por "la ruta de los dólmenes, en el que destaca el de 'La Hechicera', junto al pueblo de El Villar, donde se siente algo especial. No hay que ser místico para notar la energía del sitio. Es pura magia.”
Y cómo no, parada obligada en Vitoria-Gasteiz, donde lo verde se mezcla con lo cultural. “Además de la catedral y la almendra medieval, no se nos deben olvidar los museos como Artium, el Bibat o el museo Fournier (Naipes), que son joyas poco conocidas que redondean la visita”, ha indicado Zori.
Cielos estrellados y cascadas que quitan el aliento
El periodista, especializado en viajes, Sergi Ramis, también se atreve con las zonas más salvajes. De la Montaña Alavesa, destaca su red de miradores para ver las estrellas, en uno de los cielos más limpios de todo Europa: “Es un tipo de turismo tranquilo, respetuoso, pensado para quien busca naturaleza sin filtros. Allí el silencio y la oscuridad son parte del plan”
En la Llanada Alavesa, Ramis se rinde ante las iglesias pintadas de Alaitza y Gazeo: “Tienen frescos impresionantes, y lo más curioso es que muchísima gente ni sabe que existen. Son una joya escondida que tiene una visita obligatoria".
El viaje termina por todo lo alto en Gorbeialdea y Aiaraldea, donde las vistas y las cascadas mandan. Desde el monte Gorbea hasta la cascada de Gujuli, pasando por el santuario de Oro, cada rincón tiene ese toque de postal que no necesita filtros. Y el broche final, claro, lo pone el majestuoso Salto del Nervión, la más alta de España con sus 300 metros de caída. Además del Complejo monumental de Quejana, casa del canciller Ayala y su mujer Leonor de Guzmán, donde además son visitables sus sepulcros, que recuerda los días de torres, linajes y leyendas.
Redescubrir para volver a enamorarse
“Invitamos a todos, visitantes y locales, a redescubrir Álava con otros ojos”, ha destacado Ramis, y es que esta guía no solo invita a viajar, sino que invita a mirar de nuevo lo que tenemos cerca, para saborearlo despacio y con los cinco sentidos. Porque, como bien dice su título, Álava hechiza.

Jon Dos Santos
Redactor y editor de contenidos en el magazine Hoy por hoy Vitoria




