Zientzia Astea celebra 25 años acercando la ciencia a la ciudadanía vasca

Vitoria-Gasteiz

Zientzia Astea cumple 25 años y lo celebra con más de 200 actividades repartidas entre Bilbao, Donostia, Barakaldo y Vitoria-Gasteiz. Durante una semana, del martes al domingo, la Universidad del País Vasco UPV/EHU saca sus investigaciones con talleres, exposiciones, espectáculos y monólogos científicos destinados a todos los públicos.

“La labor divulgativa de la universidad ha ido creciendo poco a poco y cada vez se le da más importancia”, ha indicado Jorge Tejedor, director de emprendimiento y transferencia del campus de Álava. “Es básico que todo lo que hacemos dentro llegue a la gente de forma comprensible y divertida. Esa es la esencia de Zientzia Astea”.

Bajo el lema “Ciencia para un planeta sin plásticos”, la programación incluye 40 txokos, 75 talleres, 20 monólogos científicos, 11 conferencias y 6 espectáculos que buscan acercar el conocimiento a la ciudadanía e impulsar una cultura científica más crítica.

“Vivimos un momento en el que una parte de la sociedad desconfía de la ciencia. Desde el cambio climático hasta las vacunas, surgen discursos negacionistas que debemos contrarrestar con conocimiento, ya que sin ciencia no hay progreso”, ha destacado tejedor

Divulgación para despertar vocaciones

Una parte importante de las actividades está dirigida a los centros escolares, con el objetivo de despertar vocaciones científicas entre los más jóvenes y, especialmente, entre las chicas.

“Queremos que las niñas y jóvenes vean que ellas también pueden ser ingenieras, científicas o investigadoras. Romper esa brecha de género sigue siendo un reto en el que poco a poco estamos avanzando”, ha indicado Tejedor.

En Álava, el epicentro de la programación va a estar en el Museo Bibat, donde escolares y público general podrán experimentar con la ciencia en primera persona.

La ciencia y humor

El humor también tienen espacio en esta celebración con Zientzia Club, un ciclo de monólogos que combina rigor y entretenimiento. El investigador y divulgador Bittor Rodríguez encarna este espíritu con su espectáculo, con la música de Queen “I want to Break Free”, en el que mezcla ciencia, humor y canciones de Queen.

“Es importante reírnos con la ciencia”, ha indicado Rodríguez. “El humor ayuda a que la gente se acerque, se rompan barreras y la divulgación sea más accesible. Si el público disfruta, la ciencia también se queda”.

Rodríguez va a aprovechar el escenario para reflexionar sobre las modas alimentarias y los “alimentos sin”, combinando rigor científico con ironía y, este año, con un músico tocando la guitarra en directo: “A veces pedimos leche sin lactosa sin saber si somos intolerantes o no. Consumimos por tendencia, no por necesidad. Y la ciencia tiene que ayudarnos a entender lo que comemos”.

Nanotecnología al alcance de todos

Entre los muchos txokos que se van a celebrar en el Museo Bibat, uno de los más llamativos es el del grupo de micro y nanotecnología de la UPV/EHU, liderado por Lourdes Basabe, que está participando en el Congreso MicroTAS 2025 en Australia.

“Mostraremos dispositivos que permiten obtener resultados médicos a partir de una simple gota de sangre o detectar drogas en bebidas”, ha indicado Basabe. “Son ejemplos de cómo la ciencia universitaria puede transformar la vida cotidiana, acercando la tecnología a las personas”.

La investigadora ha destacado que tecnologías como los test de embarazo o de COVID son fruto de esta rama científica: “La nanotecnología ya está en nuestras casas, aunque no la veamos”.

Una semana para todos

El programa completo de Zientzia Astea está disponible en www.zientzia-astea.eus, con actividades para todas las edades. Desde exposiciones sobre el impacto de los plásticos hasta un espectáculo inmersivo que recrea el fondo marino, la Zientzia Astea 2025 invita a mirar el mundo con curiosidad científica.

“Zientzia Astea nació para acercar la ciencia a la ciudadanía, y 25 años después sigue siendo su mayor escaparate”, ha destacado Tejedor. “Si conseguimos que un niño o una niña sueñe con ser científica, el aniversario habrá merecido la pena”.