“La tortilla ya es un lujo”: el dueño del Bar Biak alerta de que el pintxo debería costar 3 euros por la subida del huevo, la patata y la luz
José Luis, responsable del Bar Biak en la calle Castaños de Bilbao, asegura que el precio del huevo se ha disparado “casi 10 euros en tres meses” y que el clásico pintxo de tortilla ya no cubre costes a 2,60 euros
“La tortilla ya es un lujo”: el dueño del Bar Biak alerta de que el pintxo debería costar 3 euros por la subida del huevo, la patata y la luz
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La subida del precio de los alimentos básicos, especialmente del huevo, está golpeando de lleno a la hostelería bilbaína, especialmente a productos tan cotidianos como el pintxo de tortilla, un imprescindible en cualquier barra. José Luis Sáenz de Lafuente, dueño del Bar Biak en la calle Castaños, lo resume con una frase que ya se escucha en muchos locales: “La tortilla pasa a ser un impuesto de lujo”.
Según explica, el precio de los huevos —ingrediente clave de este producto estrella— se ha disparado:“Seis cartones cuestan ya 51 euros, casi 10 euros más que hace nada. Hace tres meses pagaba 41”. Cada cartón contiene 30 huevos, y las cajas vienen de seis.
El pintxo de tortilla a 2,60… aunque debería costar 3 euros
A pesar del aumento general de costes, José Luis mantiene el precio del pintxo de tortilla en 2,60 euros, a costa de reducir su margen: “No puedo subirlo porque esto es un barrio. Si lo subes, la gente no lo va a comer”.
Pero reconoce que, con la subida del aceite, la patata, la luz y todos los suministros, el precio real debería ser más alto:“La tortilla debería costar ya casi 3 euros”.
La hostelería, atrapada entre costes y clientes
El dueño del Bar Biak explica que el sector está viviendo una situación límite:“ Ha subido todo. No solo los huevos, todo. Y tú al cliente no le puedes andar diciendo que hoy cobras 2 euros, mañana 2,20 y pasado 2,60”.
Por eso, los bares aplican solo una subida al año, normalmente a comienzos del ejercicio:“La subida la hacemos una vez al año. No puedes cambiar precios cada dos días”.
A esto se suma el incremento del coste laboral: “Los sueldos han subido un 15% por el convenio. Se ha doblado todo”.
Café y cortado, también afectados: “Subiré lo menos posible”
El bar mantiene por ahora los precios:
- Cortado: 1,80 €
- Café con leche: 1,90 €
Pero de cara a 2026 admite que será imposible mantenerlos:“Voy a subir lo menos posible, pero mantener no puedo. Es imposible”.
Un caso que ilustra lo que pasa en muchos bares de Bilbao
José Luis reconoce que todos los hosteleros de la zona “están igual”, debatiendo cómo enfrentarse a un encarecimiento que afecta directamente a uno de los productos más emblemáticos de Bilbao: la tortilla de patata.
Su testimonio es un reflejo de cómo la inflación en alimentos básicos —especialmente huevos, patatas y aceite— está golpeando a bares y cafeterías de la ciudad.
