Un grupo de familias de Eibar acusa al Ayuntamiento de "dejadez y negligencia" en la gestión de las plazas de las Haurreskolak

Un grupo de familias han denunciado recientemente que no haya plazas libres para sus hijos en hijas en las guarderías públicas, aunque hayan escuchado y leído declaraciones de responsables municipales, del alcalde concretamente, en las que se afirmaba que nadie se había quedado fuera del servicio. Para conocer de primera mano, han visitado Radio Eibar dos representantes de estas familias, como son Iñaki y Ander.

"La situación es la misma que se viene denunciando en los dos últimos años y con pocas esperanzas de que se soluciones", han señalado. Según los datos que tienen, a través del grupo de whatsapp, son "al menos 36 familias las que están en esta situación".

Un problema para las familias

Nos han contado que el no contar con plazas en las haurreskolak supone que habrá familias que tendrán que recurrir a excedencias laborales, reducciones de jornada, que sean los aitxitxas quienes se hagan cargo de los niños, o contratar a personas que los cuiden, quienes pueden permitírselo.

Los nuevos locales, como pronto en marzo

Ander e Iñaki han señalado que los plazos de adecuación y entrada en funcionamiento de los nuevos locales de las guarderías públicas, en las calles Blas Etxebarria y Jacinto Olabe, apuntan al mes de marzo. Además, auguran que el problema irá a más, con el nacimiento previsto de un gran número de bebés a finales de este año y comienzos del próximo.

Por otra parte, han señalado que Eibar cuenta actualmente con 63 plazas de Haurrekolak, que es aproximadamente la mitad de las que tiene, por ejemplo, una localidad similar en población como Galkakao.

Nota del grupo de familias

Recordemos que días atrás este grupo de familias hizo público un comunicado acusando al Ayuntamiento de "dejadez y negligencia" a la hora de comunicar al Consorcio Haurreskolak las necesidades de Eibar. Esta es la nota enviada también a nuestra redacción:

El 11 de abril de 2025 se publicaron en el Diario Vasco las siguientes palabras del alcalde de nuestra localidad, Jon Iraola, sobre el problema de la falta de plazas en las haurreskolas: "Nadie se ha quedado fuera y en Eibar nadie se va a quedar. Hemos estado muy vigilantes por la demanda y hemos escuchado las necesidades de las familias ".

Entre estas familias surgieron dos reacciones: la sorpresa ("¿cómo que no se ha quedado nadie fuera?") y la desconfianza ("veremos si eso es así"). Hoy por hoy, las cosas siguen igual y las familias que queremos utilizar el servicio de haurreskolas para nuestros hijos e hijas seguimos sin ninguna solución y, sobre todo, sin ningún apoyo de las instituciones del pueblo.

No han sido pocas las veces que hemos alzado la voz ante esta situación. Desde el Ayuntamiento hemos recibido palabras bonitas, pero la realidad es que poco o nada se ha hecho para dar respuesta a esa necesidad apremiante de las familias: el Consorcio Haurreskolak fue quien a principios de año informó al Ayuntamiento de Eibar de que se podían utilizar los fondos europeos Next Generation para renovar las haurreskolas de la localidad (de lo contrario, ¿iba a hacer algo el Ayuntamiento?); los padres solicitamos una reunión con el Consorcio Haurreskolak a finales de septiembre y no obtuvimos respuesta. Sin embargo, el Consorcio se puso en contacto con el Ayuntamiento para organizar una reunión a tres bandas, pero el Ayuntamiento rechazó la propuesta; semanas después, solicitamos una reunión con el Ayuntamiento y pedimos al Ayuntamiento que invitara a la misma al Consorcio Haurreskolak.. Para nuestra rabia (porque una vez llegados hasta aquí no podemos utilizar la palabra "sorpresa") el Ayuntamiento no invitó al Consorcio

Haurreskolak y, por si fuera poco, tuvimos que escuchar frases como "no nos parece que estemos ante una situación excepcional", "¿por qué no contratáis a alguien para que os cuiden los hijos en casa?", "me parece una buena alternativa que llevéis a los niños a las guarderías de otros pueblos", etc. Eso sí, el Ayuntamiento, por iniciativa de las familias, puso a nuestra disposición un cuestionario para que manifestáramos nuestras necesidades, pero los representantes municipales se presentaron a la reunión sin ni siquiera haber mirado cuántos padres respondimos al mismo. Así las cosas, han quedado claras dos cosas: por un lado, que el Ayuntamiento, además de no hacer un trabajo a la altura para buscar una solución urgente para las familias, nos ha mentido y engañado; por otro, que para el Ayuntamiento las haurreskolas tienen una función meramente asistencial, olvidando la función educativa. El 26 de septiembre, las familias escribimos al Consorcio Haurreskolak preguntándole si se podía hacer algo para adelantar los plazos de todo este proceso, pero no obtuvimos respuesta.

El 12 de noviembre celebramos una reunión con el Consorcio Haurreskolak y nos trasladaron que no pueden adelantar plazos y procesos hasta que finalicen las obras de las nuevas haurreskolas, pero que una vez que esté todo hecho, abrirán un periodo de matrícula extraordinario; en esta reunión, aunque recibimos un respeto y una empatía que no hemos recibido en ningún momento por parte del Ayuntamiento, no nos han dado ninguna solución y, por lo tanto, estaremos al menos cinco meses sin una sola plaza libre en las haurreskolas de Eibar.

Dicho todo esto, los padres queremos denunciar rotundamente la negligente actuación del Ayuntamiento de Eibar en estos últimos meses. En la noticia de arriba, el inicio de las obras en las haurreskolas se preveía para septiembre y el inicio del uso de los mismos para diciembre. Aunque desconocemos los motivos de este retraso, la actitud del Ayuntamiento nos hace pensar que ha hecho las cosas tarde, con improvisación y con una evidente falta de seriedad que requiere un problema de tal magnitud. La dejadez del Ayuntamiento nos va a acarrear graves consecuencias a las familias: la imposibilidad de conciliar, la necesidad de coger excedencias con los perjuicios económicos que ello nos acarrea, la imposibilidad de planificar los próximos meses, etc.

Si ya de por sí no era fácil traer niños y niñas al mundo, con la inestimable "ayuda" de nuestro ayuntamientoes aún peor. ¿Para cuándo en el Ayuntamiento, un técnico de educación?