Agentes sociales denuncian el adelanto del desalojo de 111 personas en un edificio abandonado de Martutene

San Sebastián

Este viernes, diferentes asociaciones se han reunido delante de la escuela de Martutene para denunciar que el próximo 4 de diciembre desalojarán a 111 personas, de las cuales 4 son mujeres. En un principio, la evacuación estaba prevista para febrero de 2026, pero han adelantado la fecha, dejando a estas personas con menos de un mes para encontrar otro lugar donde cobijarse.

Desde Harrera Sarea denunciaban que “tanto los medios de comunicación como las redes sociales y muchos debates públicos han presentado el lugar como un epicentro de inseguridad, buscando criminalizar a las personas que residen aquí”, algo que atribuían a que “en Donostia el racismo está en auge”.

Como responsables de esta situación señalaban “al Ayuntamiento de San Sebastián, la Diputación y el Gobierno Vasco”, ya que “desde hace mucho tiempo saben que estas personas se van a quedar en la calle y no han hecho nada para revertir esta situación. No han presentado ningún plan de contingencia”.

También destacaban que otro de los problemas que afrontan estas personas es la Ley de Extranjería, que “les obliga a vivir de forma irregular durante un mínimo de dos años, sin que se garanticen unas condiciones de vida básicas, sin acceso a la vivienda, sin permiso de trabajo y, por tanto, sin fuentes de ingreso”.

Actualmente, en Donostia, las personas sin hogar solo pueden acceder a cinco noches en un albergue cada tres meses, y no tienen la posibilidad de dormir en parques, portales o bajos de edificios, ya que, según denunciaban, “las fuerzas policiales les expulsan de los espacios donde intentan pernoctar”. Por ello recordaban que “el albergue municipal de La Sirena y sus 100 plazas siguen vacías”.

Desde Harrera Sarea buscaban invitar a la reflexión, recordando que “no son un simple número: son personas con nombre y apellidos, de entre 20 y 40 años, provenientes de diferentes países del norte de África, con la esperanza de poder llevar a cabo sus proyectos de vida y futuro en Donostia”. Por este motivo, hacían un llamamiento “a tomar las calles y unirse a la movilización del 4 de diciembre a las 19:00”.

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