Descienden los casos de VIH, pero aumentan los de otras infecciones sexuales en Gipuzkoa

“Aunque las nuevas infecciones por VIH han disminuido en los últimos años, el problema no ha desaparecido y se suma una preocupación creciente por el aumento de otras infecciones de transmisión sexual, como sífilis, gonorrea y clamidia, lamenta Paqui Lucha, presidenta de la Asociación Ciudadana Antisida de Gipuzkoa, en Radio Irun, Cadena SER.

En el Día Mundial de la Lucha contra el Sida, la asociación reconoce “el descenso en nuevos casos de VIH”, pero advierte del “aumento de otras infecciones de transmisión sexuales”. Entre ellas, destaca la sífilis, “prácticamente erradicada hace años”, pero que ha vuelto a aparecer con fuerza”, explica Lucha. El perfil más afectado son hombres de entre 30 y 37 años, aunque cada vez se detectan más casos en personas jóvenes de veintipocos años. Para la presidenta de la asociación, la causa está en “la relajación de las medidas preventivas”, que llevan a “bajar la guardia” y pensar: “Esto ya no existe”.

En cuanto al VIH, la situación médica ha mejorado notablemente. Hoy, una persona con carga viral indetectable no transmite el virus, lo que “supone un avance enorme en prevención”, celebra. Sin embargo, el estigma sigue siendo el gran enemigo. “Ese es el mayor virus que tenemos hoy en día: el rechazo y la vulneración de derechos de las personas que conviven con el VIH”, denuncia. La asociación trabaja para garantizar una vida digna, sin discriminación, y reclama normalizar la conversación sobre salud sexual en colegios y espacios educativos.

Tanto para el VIH o para el resto de ITS, la presidente ha subrayado la importancia de las pruebas de diagnóstico precoz. “La única forma de saber si se es portador es mediante una prueba específica de VIH”, ha explicado. Una prueba disponible en consultas de ITS en Donostia y en asociaciones. “Un diagnóstico precoz es un seguro de vida. Cuanto antes se ponga el tratamiento, antes se consigue una carga viral indetectable, con lo cual no se transmite y la calidad de vida mejora”, afirma. El objetivo es ambicioso: que para 2030 el VIH deje de ser un problema de salud pública. Para lograrlo, Paqui Lucha reclama una educación sexual integral desde edades.