La única maratón de España con sol y 20 grados en pleno diciembre: así es la carrera que siempre gana un inglés o un irlandés

Bilbao

Esta semana, SER Runner viaja hasta la Maratón Internacional de Lanzarote, que celebra estos días su 33ª edición. Una fiesta del running que tiene lugar cada diciembre en una temperatura media de 21 grados, bajo un cielo azul y un tiempo normalmente soleado. Con este cartel se presenta una prueba que ofrece distancias para todo tipo de atletas (42 kilómetros, 21, 10, pruebas infantiles y para corredores con diversidad funcional) e incluso una alternativa lúdica para quienes quieren ir calentando motores de cara a la Navidad.

A semanas de Navidad

Y es que el fin de semana festivo se inaugura con la ya tradicional carrera de Papá Noel, sobre un circuito de cinco kilómetros. La imagen que dejan es, desde luego, curiosa: 600 participantes corren vestidos de Papá Noel por la costa de Lanzarote. Los 200 primeros inscritos cada año, además, reciben el traje típico de regalo solo por adquirir el dorsal.

Al final, la prueba aúna diversión y deporte en una mezcla que cada vez atrae más adeptos. Desde luego, el destino es propicio para que se acerquen miles de visitantes tanto desde la Península como desde el extranjero. Su director, Juan Carlos Albuisec, nos confiesa que "hay una gran competencia entre clubes irlandeses e ingleses para ver quién es el que logra la mejor marca". Reconoce que "cada año suele ser uno de los dos el que se lleva la victoria, así que a ver si por fin logramos que se lleve el triunfo algún corredor nacional".

Un mes poco ventoso

Gane o no, lo que encontrará todo el que decida apuntarse en próximas ediciones será una meteorología distinta a la peninsular: "Lanzarote es conocida por el viento, por la práctica de deportes náuticos, como el windsurf o la vela, pero diciembre es un mes muy poco ventoso, por eso escogimos esta fecha. Muchas de las personas que han venido de fuera se ha sorprendido de haber corrido solo con una ligera brisa que, además, ayuda a bajar algo la temperatura corporal, sobre todo cuando salen días de sol", apunta Albuisec.

Además del escaso viento, hubo otra razón que llevó a los organizadores a elegir el mes final del año para la prueba: "Nosotros nos dedicamos al turismo deportivo y teníamos claro que los primeros quince días de diciembre la ocupación baja en la isla. Siempre son fechas en las que estamos preparando las navidades, con lo que nos cuesta salir de casa". Sin embargo, "hemos conseguido es que mucha gente decida tomarse unas vacaciones en familia, previas a las navidades que después sí se suelen pasar en casa".