Rubén Méndez: "Compartimos una vivienda cooperativa por la que pagamos 600 euros al mes"

Bilbao

Jorge López lleva año y medio residiendo en la vivienda cooperativa de Gordexola, en Bizkaia, junto a otras 15 personas, cuatro de ellas niños y niñas. Después de años trabajando, han logrado rehabilitar un caserío, una casa palacio de 1660 en ámbito rural, que se ha convertido en su hogar. Se trata de una vivienda en cesión de uso sin ánimo de lucro de ámbito rural para varias unidades de convivencia. Es una vivienda colaborativa formada por espacio íntimos -habitaciones, baños y un cuarto de estar- y otros comunes, como la cocina o el salón.

Ametxe es un sistema habitacional a precio de coste y de gran eficiencia abierto a la sociedad. El proyecto cuenta con espacios para actividades y una visión regenerativa en 3 ejes: economía, social y ecológica

En A vivir que son dos días Euskadi, Jorge ha compartido su experiencia y ha hecho balance de estos 18 meses. Junto a él, Rubén Méndez, activista y una de las 16 personas que residen en Gordexola. Son comunidades de vecinos que se organizan para promover y gestionar de forma colectiva un edificio de viviendas. La cooperativa es la propietaria de todo el inmueble y los socios adquieren un derecho de uso indefinido e intransferible, con propiedad cooperativa.

Al entrar, cada unidad familiar hace una inversión inicial, en el caso de Rubén Méndez fue de 40.000 euros. A partir de ahí, cada mes pagan cerca de 600 euros, a modo de cuota. Ametxe ha recibido una ayuda de 25.000€ del Departamento de Patrimonio de la Diputación Foral de Bizkaia por la rehabilitación del caserío con valor histórico, además de ayudas de eficiencia térmica del EVE por valor de 8.600 euros. De ahí que soliciten apoyo financiero púbico y, en especial, de los ayuntamientos. "Pedimos que se impliquen", ha pedido Rubén Méndez.

8.000 caseríos

Según un estudio realizado por la Asociación Vasca de Cohousing Ametsak Sortzen, en torno a un 20% de los caseríos vascos, entre 8.000 y 10.000 de un total de 45.000 censados, está deshabitado y podría convertirse en vivienda cooperativa. En Cataluña, se está tramitando la ley de cooperativas de vivienda en cesión de uso y es el espejo en el que se miran en Euskadi donde, hoy por hoy, hay cuatro caseríos en esta modalidad: tres en Bizkaia y una en Araba.

El objetivo es impulsar este modelo de vivienda que "promueve, además, la reforestación ecológica, la agricultura sostenible o la ganadería". "Una forma, advierte Méndez, de aliviar el problema de la vivienda sin entrar en el circuito especulativo".