Sandor Martín volverá a por el cinturón mundial en 2026: "Se lo prometí al Athletic y no pienso irme de este deporte sin ser campeón del mundo"

Bilbao

Sandor Martín (42-4, 15 por KO) vuelve a su casa este fin de semana. El boxeador catalán siempre ha tenido un vínculo especial con la ciudad, también con el Athletic, equipo del que es declarado seguidor. Tanto es así que la entidad le concedió el año pasado el honor de realizar el saque de honor en la previa del partido ante el Atlético de Madrid tras proclamarse campeón de Europa y antes de su combate por el título mundial.

Aquella pelea por ser el número uno del mundo se le atragantó. En el combate, disputado en Nueva York, se quedó a un palmo de conseguir el cinturón mundial del superligero. Muchos fueron los que alzaron la voz contra la decisión no unánime de los jueces de dar por vencedor a Alberto Puello. Ahora está en el camino de volver a intentarlo en 2026.

La pelea con Kurylenko

Para ello se ha organizado precisamente el combate de este sábado, en el que Sandor se enfrentará al campeón de Ucrania, Yanis Kurylenko. "Es un boxeador que tiene una frecuencia de golpeo alta, lo que le convierte en un boxeador de acción; es bastante ofensivo y, como decimos en el argot pugilístico, tiene un estilo muy del este, es una escuela muy definida y creo que será un combate bastante entretenido", declara Sandor en Radio Bilbao.

El boxeador, que protagonizará la pelea estrella de una velada en la que también habrá hueco para boxeadores locales y para el K1, está ya en Bilbao, donde este jueves pisó San Mamés para el cara a cara con su rival. Tiene en mente que los diez asaltos del sábado serán una carrera de fondo: "En determinados momentos puedes pensar que no lo vas a conseguir, pero has de tener paciencia y entender la situación. Cuando has hecho un esfuerzo grande, lo que sería en el fútbol un sprint, y tienes que seguir, hay que saber estar, tener paciencia y esperar al momento correcto para meter la estocada" , sentencia.

A por el cinturón mundial

Lo que ocurra en el Bilbao Arena será la antesala de lo que quiere Sandor sea su gran momento en 2026: "Es un preámbulo antes de volver a disputar el título mundial n 2026. El pasado marzo en Nueva York hubo mucha gente que me vio ganar, pero el resultado fue desfavorable y no pude traer a casa el cinturón. Al Athletic le hice la promesa de que volvería algún día con el cinturón de campeón del mundo y eso lo voy a cumplir, no pienso irme de este deporte sin ser campeón del mundo".

Menciona al Athletic y nos cuenta cómo comenzó su vinculación con el club rojiblanco, pese a ser de Barcelona: "Mis dos abuelos son athleticzales. Uno es de Jerez de la Frontera, así que no sé por qué es del Athletic; el otro es gipuzkoano, así que me imagino que lo haría por tocar las narices a la familia", reconoce sonriente.

Su pasión por el Athletic

Este último al que menciona, oriundo de Pasaia, tuvo que emigrar a Francia tras el estallido de la Guerra Civil. Allí siguió disfrutando de un deporte cuyos secretos transmitió después a su hijo, el padre de Sandor. Cuando la familia regreso de Francia, décadas después, se asentó en Barcelona. Allí el padre de Sandor retomó el boxeo, aunque como entrenador. Puso en marcha un gimnasio en el que después Sandor empezaría a disfrutar de los guantes desde los seis años.

Así que esos abuelos le inculcaron el amor por el boxeo, pero también por unos colores: "Es algo que me llega por herencia familiar, por tradición. Después, cuando crecí, me fui sintiendo identificado con la cultura, la filosofía y los valores del Athletic y supe que era el equipo al que yo quería seguir y que también representa a los valores que nosotros defendemos en nuestro gimnasio".

Precisamente hablando del Athletic hace también un paralelismo de lo que está siendo el año del equipo y el suyo personal: "Está siendo caótico, pero teniendo tantas competiciones seguidas creo que tiene mucho valor lo que está haciendo el Athletic, cómo está compitiendo de tú a tú con los grandes de Europa. Y también en LaLiga. Todavía queda mucha temporada, hay que ir poco a poco".