La Puerta de la Villa acogerá un mosaico de 50 metros cuadrados que reivindica el origen del Cristianismo en Occidente

Mérida

En las próximas semanas comenzará la colocación, en una fachada de la Puerta de la Villa emeritense, de un gran mosaico cerámico que, con motivo del Año Jubilar Eulaliense reivindicará a la ciudad como origen del Cristianismo en Occidente. Ha sido elaborado por la mosaiquista emeritense Luis Díaz Liviano y tiene unas dimensiones que superan los 50 metros cuadrados.

El mural representa una alegoría del kilómetro cero de los caminos eulalienses. Están representados los símbolos propios de Santa Eulalia -la palma y el hornito- y una parte de la aureola de la Mártir. "Hacia esos símbolos discurren varios caminos y, como fondo del mural, distintas tonalidades de grises que representan la tradicional niebla " que suele cubrir la cuidad en fechas próximas a la festividad de Santa Eulalia. Una brújula en la parte baja indica que se está en ese kilómetro cero, rodeando la escena la leyenda 'Mérida origen y destino peregrino', según han explicado desde el Ayuntamiento emeritense.

La alegoría se completa con el lugar elegido para la instalación, la fachada de una vivienda en la Puerta de la Villa "un espacio junto a la domus eclessiae y donde se va a realizar una gran plaza", según ha argumentado la delegada de Semana Santa y Año Jubilar, Ana Aragoneses. En este sentido, hay que recordar que, según hallazgos recientes la primera 'domus eclessiae' -lugar de reunión de los primeros cristianos y origen de lo que se conoce hoy como parroquias o iglesia- emeritense estaría situada en lo que hoy es la Sala Decumanus, situada en la confluencia de la calle Santa Eulalia y la Puerta de la Villa.

Además de este mosaico gigante, Díaz Liviano es la autora de las placas-mosaico que señalizarán las paradas del Via Martyrum desde el Puente Romano hasta la Basílica de Santa Eulalia.