Sociedad

Las obras de la primera planta de compostaje FORS de Extremadura, en Llerena, comenzarán en las próximas semanas

El Plan Integrado de Residuos regional contempla doce, además de nueva maquinaria, que ya ha comenzado a instalarse, en los Ecoparques

Una batería de contenedores para la recogida selectiva de residuos urbanos

Mérida

En las próximas semanas comenzarán las obras de la primera de las doce plantas de compostaje de la fracción orgánica recogida separadamente (FORS) cuya construcción prevé el Plan Integrado de Residuos de la región, según ha confirmado el director general de Sostenibilidad, German Puebla a Ser Extremadura. Estará situada en Llerena y será la primera destinada al tratamiento de los residuos orgánicos, los que se depositan en el contenedor marrón. Será la UTE formada por las empresas Medio Ambiente, Residuos y Agua Marea S.L y Contratas Vilor, S.L., por valor de casi cuatro millones de euros (3.879.805,54 concretamente) , según aparece publicado en la Plataforma de Contratación del Sector Público.

Esta compostadora, que se situará junto a la planta de transferencia de residuos de Llerena en una parcela de casi 23.000 metros cuadrados, dará servicio a 31 poblaciones del suroeste de Extremadura con una población aproximada de 50.000 habitantes. Según las previsiones de la dirección general entrará en funcionamiento "como muy tarde a finales de 2025, principios de 2026" y será la que abra el camino a otras once que se irán construyendo de manera progresiva. La intención, según el responsable de sostenibilidad es que todas ellas estén en el entorno de los Ecoparques -hay siete en la región- o en su defecto en el de las plantas de trasferencia de residuos "con el objetivo de optimizar los recursos y todo el tratamiento de los residuos".

Aumentar la recogida selectiva

El Plan Integrado de Residuos de Extremadura (PIREX) en el que se recoge la construcción de estas plantas de tratamiento de residuos orgánicos fue aprobado a principios de este año 2024 por el consejo de Gobierno. El documento, con vigencia hasta 2030, plantea el aumento de porcentaje de reciclado de residuos hasta el 55% en 2025; el 60 en 2030 y el 65% en el 2035, objetivos para los que desde la Dirección General de Sostenibilidad se está trabajando, junto a "los grandes ayuntamientos a través de un grupo de trabajo para que se cumplan, algo que no será fácil". También se mantiene el contacto con áreas poblacionales más pequeñas con el mismo sentido.

La otra gran línea de trabajo de la dirección general respecto del PIREX se sitúa en los Ecoparques. Allí se están implementado nuevas técnicas y sistemas de separación de residuos. En este sentido, según Puebla, "se está mejorando el triaje para hacer una segunda separación de los residuos antes de ir a vertedero. Los ecoparques se están renovando en su maquinaria para lograr mejores resultados". En este sentido, uno de los retos señalados en el plan regional de residuos es el de incrementar la recogida selectiva de vidrio y envases "estancada" desde antes de la pandemia. "Si bien es cierto que la calidad de la recogida ha mejorado y presentamos muchos menos impropios -menos residuos que no sean vidrio en el contenedor destinado a este material, por ejemplo- tenemos que hacer más esfuerzos de concienciación, porque en este caso el comportamiento ciudadano es vital", explica Puebla..

En este caso, desde la administración regional se está trabajando de manera especial con las empresas públicas Ecovidrio y Ecoembes para que aumenten sus campañas de concienciación, así como los "puntos de recogida selectiva, fundamentalmente en los pueblos más pequeños".