Caos en el segundo tren del día: los pasajeros se quedan tirados en Monfragüe por una avería y sin buses suficientes

Plasencia

Indignación entre los pasajeros del segundo tren del día, 9 de junio, con destino a Plasencia que contrasta con la felicidad y júbilo con el que se ha recibido el primer Alvia que esta misma mañana entraba por primera vez en Plasencia. El convoy, que debía salir de Madrid-Atocha a las 10:55 de la mañana, sufrió una avería técnica que provocó una salida con más de hora y media de retraso, y acabó dejando a decenas de viajeros varados en Monfragüe a primera hora de la tarde.

“Son casi las tres de la tarde y seguimos sin llegar a Plasencia. Estamos tirados en Monfragüe, esperando un autobús con solo 14 plazas para más de 50 personas”, denunció uno de los pasajeros afectados, visiblemente molesto por la falta de soluciones.

El tren, según explicó uno de los pasajeros afectados, nunca llegó a su destino, a Plasencia. Una vez detenido en Monfragüe, la única alternativa ofrecida por Renfe fue un microbús claramente insuficiente. “Algunos han llamado a familiares para que vengan a recogerles. Esto es un despropósito”, añadió.

Los viajeros denuncian que, aunque el personal de Renfe “ha sido correcto”, la situación evidencia la falta de planificación ante incidencias técnicas. “Entendemos que puede haber fallos, pero no hay ningún plan B ni plan C. No se puede gestionar así un transporte público”, lamentan.

El incidente contrasta con la llegada puntual del primer Alvia del día, que sí cubrió la ruta sin contratiempos y fue recibido por la sociedad civil placentina. Pero este segundo tren ha reabierto el debate sobre la fiabilidad del servicio ferroviario extremeño.

“Llegar tarde te desequilibra la vida. No puedes comer, llegas mal al trabajo... Esto no es solo un retraso, es un problema serio para mucha gente”, concluyen.

Los pasajeros permanecieron durante más de una hora bajo el calor de junio, sin información clara sobre cuándo podrían retomar el viaje hacia su destino final.