La bicicleta: el medio de transporte del futuro

Lugo

En marzo de 2020 la vida tal y como la conocíamos cambió radicalmente. Durante aproximadamente tres meses toda nuestra actividad quedó reducida a las paredes de nuestras casas. Por eso, cuando en abril de ese año uno de los pocos motivos para poder salir a la calle era para hacer ejercicio, la gente se volcó con el deporte. Aquellos que tenían bici en casa la sacaron y los que no, colapsaron las páginas webs y líneas telefónicas de muchas tiendas de bicicleta. A partir de ese momento el auge del uso de la bicicleta se hizo palpable en las calles de muchas ciudades de España.

Santiago Seijas, propietario de la tienda Mybike, explica que este aumento en la compra de bicicletas es el mayor que se ha producido desde que abrió su tienda y que no ha sido hasta ahora, dos años después, cuando se ha vuelto a estabilizar. Añade además otra causa a este auge del uso de la bicicleta: el compromiso con el medio ambiente. Muchos expertos aseguran que la bici será también el medio de transporte del futuro, pues puede ser muy favorable para la economía. Por estas razones los gobiernos de distintas comunidades están aplicando políticas para promover el uso de la bicicleta en el ámbito urbano. Un ejemplo claro lo tenemos aquí, en Lugo, con la construcción del nuevo carril bici.

Estos proyectos, para fomentar el uso de la bicicleta, contrastan con la realidad que están viviendo muchas tiendas: eternas listas de espera para conseguir diferentes modelos de bicis. Y es que el auge de este futuro medio de transporte coincide con la crisis mundial de suministros lastra del mercado. Hace unos años en la tienda de Santiago Seijas el tiempo máximo de espera para una bicicleta era de alrededor de 3 meses. Ahora la espera se ha elevado a un año e incluso con algunos modelos hasta a dos.

A pesar de esto, no todo está perdido para conseguir un aumento en el uso urbano de la bicicleta. Los modelos que se enfrentan a estas largas lista de espera son de competición, en su mayoría específicos para hacer deporte. Por lo que no hay excusa para empezar a usar más la bici en el ámbito urbano.

La preocupación por el cambio climático y la subida del precio del gasoil son los alicientes principales para convertir a la bicicleta en la sustituta al coche. Por eso mismo los gobiernos deben aprovecharse de este contexto para realizar proyectos públicos para promover la movilidad sostenible.