El Compos ajusta cuentas con el Arenteiro

Santiago de Compostela

Ningún equipo, en ninguna competición, había logrado ganar en Espiñedo desde el pasado mes de febrero. En un partido con mil batallas libradas en todas las zonas del campo, áspero, con 14 amonestaciones y dos expulsiones (la del portero y delegado local), el Compos supo aplicar la sobriedad y la concentración a un partido que requería ganar duelos individuales, estar muy atento al balón que saltaba sobre el irregular césped y aprovechar la oportunidad que se pudiese presentar para llevarse los puntos.

Esa oportunidad, que a la postre acabaría concediendo el botín de la victoria, apareció cuando en el minuto 24 el colegiado, muy valiente durante todo el partido, señaló penalti por manos de Pol Bueso. Por la tele eran claras, en el césped seguro que mucho más difíciles de apreciar, pero el árbitro Gonález Páez las vio y las castigó señalando el punto de penalti. Ahí colocó Mario Rodríguez el balón para, tras varios amagos en su carrera hacia el golpeo, engañar a Diego marcar el 0-1.

Quedaba un mundo de tiempo por delante, tras las continuas interrupciones, cambios y demás, se prolongó el tiempo reglamentario hasta más allá de los 100 minutos, pero el Compos hizo un férreo ejercicio de control y esfuerzo sobre un rival que acabaría quedándose con diez por la roja directa a su portero que tuvo que derribar a Samu cuando este galopaba en una contra para hacer el 0-2.

Con la victoria lograda en el campo del líder, el Compos de Fabiano logra varios objetivos: encadenar un tercer triunfo consecutivo, ascender a puesto de play-off y confirmar que la idea del técnico va calando cada vez más en un colectivo que se va comprometiendo y creyendo en la misma.