Lugo

No, no toda la lista de regalos enviada a Laponia y Oriente debe aparecer debajo de los árboles de Navidad. Es más, consentir y regalar a los más pequeños de la casa sin filtro tiene grandes consecuencias. El psicólogo educativo, Iván Pico, nos explica que regalar sin mesura lo único que crea es una "generación de falsas expectativas".

Bombardear a un niño o una niña con muchos regalos desde la cuna es hacer que crezca "teniendo de todo", por lo que no se acostumbra a "tener menos". El saciar todas las demandas en edades tempranas tiene consecuencias que empiezan a reflejarse en la adolescencia.

"Cada vez nos encontramos más con jóvenes, adolescentes, que tiene una muy baja tolerancia a la frustración porque han crecido en una sociedad que les ha dado todo lo que querían sin tener apenas que esforzarse por conseguirlo", explica Pico.

Recibir decenas y decenas de regalos provoca, según el experto, que se divida el sentimiento de afecto entre todos ellos, por lo que al final, el valor que se le da a cada uno de los regalos es menor, se divide.

Que los más pequeños se frustren por no tener los regalos que quieren depende, en gran medida, del entorno que les rodea. Según el psicólogo lucense se deben evitar las comparaciones entre amigos, la exposición desmedida a anuncios de juguetes o incluso "cambiar" las expectativas depositadas en los regalos.

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A cada paquete le acompaña un estímulo. "Si nos focalizamos en un regalo material el niño o la niña tendrá un estímulo extrínseco, ajeno" lo que puede aumentar su nivel de frustración si finalmente en ese paquete físico no aparece lo que quería. Sin embargo, "si lo que regalamos son momentos juntos, el niño o la niña tendrá un estímulo intrínseco. Su objetivo cambio y su expectativa también", matiza.

La regla de los cuatro regalos

Siempre fue mejor la calidad que la cantidad, y en los regalos navideños pasa lo mismo. Para Pico es esencial que se limite el número de paquetes que aparezcan bajo el árbol y por eso comparte la regla de los cuatro regalos. "Lo recomendable es que familia y amigos se pongan de acuerdo y gestionen que entre todos no se supere esta cantidad", recuerda.

La lista estará conformada por:

1. Un regalo que esté en su lista de peticiones, "debemos de cumplir una de las ilusiones" que tenga el niño o la niña que haya escrito la carta a Papá Noel o los Reyes Magos
2. Algo que necesite, que las propias familias sean las que decidan qué se necesita para ir a cole, para su día a día, para hacer deporte...
3. Un regalo cultural, como un libro, puzles... elementos que fomenten la creatividad e imaginación del niño o juegos que fomenten la interacción y el contacto cara a cara.
4. Tiempo. Es fundamental regalar tiempo de calidad en familia, ir al cine, una tarde en el río...

Que los más pequeños de la casa sumen más regalos "puede ser peligroso en cuanto a que aprenderán a valorar de la manera apropiada las cosas". Además, Iván Pico destaca que, a veces, "regalamos muchas cosas porque el que hace el regalo está muy emocionado con hacerlo y disfruta regalando, pero no piensa en las consecuencias del que los recibe".