Antonio Fernández, gestor de procesos del Hula: "Como sanitarios cumplimos muy bien, pero no tanto como empleados públicos”

Lugo

El gestor de procesos, y médico, del Hospital Universitario Lucus Augusti ( HULA ), observa que “pese a tener un buen sistema" y no tener problemas diferentes a los que tienen "otros países como puede ser Inglaterra, Canadá o Asutralia", destaca que "como sanitarios funcionamos bien, pero no tanto como empleados públicos".

Para el médico chantadino existen "vicios" y "problemas estructurales, imposibles de erradicar en un corto plazo," que dificultan el correcto funcionamiento del sistema.

Por una parte, destaca la tardanza a la hora de atender a los pacientes. "Nadie tiene que esperar tres años para que le vea un especialista, pero sí más de uno, y es difícil de explicar este retraso si miramos los datos oficiales ", puntualiza Fernández.

Las cifras que los políticos, "sean del partido que sean", hacen públicas no son falsas, "pero sí inducen al engaño". Fernández puntualiza que existen unas "largas listas de espera para aquellos problemas que no parezcan urgentes o graves".

Es aquí donde el médico lucense habla de un claro problema de “transparencia” a la hora de explicar los tiempos de espera reales y es que "si una persona tiene que esperar un año a que le vean y en los datos se dice que la espera media es de seis meses, bien, la media son 6 meses, pero no el tiempo real que va a tener que esperar".

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Otro de los problemas fundamentales del sistema es "el retraso con el que nos llegan las últimas tecnologías". Ejemplifica el doctor lucense con el caso de la tecnología DaVinci. Un sistema que en Francia usan desde hace más de una década "y aquí la tenemos desde hace dos".

Más allá de los problemas de "transparencia y retraso tecnológico, así como la falta de personal que creo es puntual, pero grave" el gestor de procesos del HULA habla de "vicios adquiridos".

El primero es que "nuestros responsables políticos no son claros a la hora de explicar los tiempos de espera" y el segundo que "cuando se habla de listas de espera largas, la gente intenta saltárselas".

Algunos usuarios, cuando ven lo tarde que serán atendidos por el sistema público, "buscan la forma más eficaz de saltársela: hablando con un amigo, pidiendo cita en la privada con al esperanza de que le vean en la pública antes, protestar muchos para ver si les hacen más caso que a otro... y este es un vicio que hace que la equidad desaparezca".

Para el experto la solución pasa por elaborar un plan a 7 o 10 años invirtiendo más, formando más médicos y homogeneizando su formación. Pero mientras no llega, el chantadino apuesta por "parches que eviten hacer grandes daños", algo en lo que señala directamente como responsables a todos los trabajadores públicos que "como sanitarios cumplimos muy bien, pero no tanto como empleados públicos”. Una condición que nos “exige facilitar los derechos a todos los usuarios".