"Salí disparada como un proyectil": las víctimas del Alvia reviven la pesadilla de Angrois
Comienza la fase civil del juicio, con el turno para los supervivientes y los familiares de los fallecidos en la tragedia ferroviaria
"Mi cuerpo salió disparado"
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Santiago de Compostela
Llegó el turno de las víctimas en el comienzo de la fase civil por el accidente del Alvia en Angrois en julio de 2013, en el que murieron 80 personas y otras 140 resultaron heridas. Una mañana de testimonios desgarradores que han llegado a emocionar a la propia jueza, María Elena Fernández Currás.
Las dos primeras personas en declarar, ambas por videoconferencia, fueron una madre y su hija. La madre era la que viajaba en el tren, y tras el impacto señala que solo escuchaba murmullo y a personas diciendo "la hemos encontrado" y que había que moverla "con mucho cuidado". "Solo sé que estuve mucho tiempo", añadió.
Su hija relató su sufrimiento, y el de su padre, a distancia, al enterarse de que había ocurrido el accidente y mientras su madre no les cogía el teléfono. También relató desgarrada lo que sintió al llegar al Fontes do Sar, el pabellón en el que se recolectaron todos los objetos extraviados, cuando se encontró con familiares de personas que habían muerto. El contraste entre sentirse feliz porque su madre estaba viva y el dolor de las demás personas. "No hay dinero que pague lo que hemos vivido", declaró.
Una tercera declarante estaba esperando por su familiar, y recuerda "el caos" en los primeros instantes, hasta que una persona le dijo que su madre "estaba bien". Su madre, que sobrevivió al accidente, murió cinco meses después por culpa de un derrame cerebral ocasionado por un traumatismo.
"Recuerdo los gritos pidiendo ayuda"
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"Sabía que íbamos a descarrilar"
Otro de los pasajeros explicó que fue consciente de la sensación de velocidad: "Le dije a mi compañero que íbamos a descarrilar". Fue el comentario que hizo antes del accidente. Él fue de los que salió mejor parado. Con heridas, magullado, pero con fuerzas para ayudar a las personas que estaban a su alrededor.
Con todo, para él lo peor es seguir reviviendo la "pesadilla" cada día. Fue "un verdadero infierno". Sí que le "ha reconfortado" la conversación y el arrepentimiento por parte del maquinista.
"El vagón empezó a temblar como un terremoto. Me agarré con todo al asiento, y salí proyectada. No me podía proteger la cabeza. Salí como un proyectil", relató otra de las viajeras, que comentó que "estaba viva, pero atrapada". Una de las consecuencias del accidente es que "no he vuelto a dormir igual". También dijo que "no hay dinero que pueda pagar esto".
Una sexta persona dijo que recuerda "terror", y que perdió la consciencia por el impacto contra el asiento. Cuando despertó, a su alrededor solo vio cuerpos y trozos, los "gritos de personas pidiendo ayuda". "Se me hizo eterno", añadió.
Una vez en la ambulancia le pidió a los profesionales que avisasen a sus padres de que estaba viva. Ahora afirma que "cada vez que el bus urbano gira hacia la izquierda pienso que va a volcar. Ya sé que no debería, pero el tren tampoco debía descarrilar".
Iñigo Caínzos
Redactor en Radio Galicia desde julio de 2021. Graduado en Administración y Dirección de Empresas y...