Kevin Vázquez: El paciente nigranés

Vigo

En 1996, Anthony Minguella nos conmovía a todos con la historia del Paciente Inglés que acabó consiguiendo 9 estatuillas. En esa película sobre la II GM, Ralph Fiennes interpreta magistralmente a un herido de guerra atendido en un remoto monasterio por una enfermera canadiense (Kristin Scott Thomas). El paciente pudo contarle la historia de su vida a Hada y ella tuvo la paciencia para acompañar a un hombre gravemente herido en la guerra. Esa misma paciencia que tiene un herido de la guerra futbolística como Kevin Vázquez. Nunca hace ruido, siempre suma, con la paciencia por virtud, esperando una oportunidad desde el banquillo. El paciente es Óscar Mingueza que sigue “herido de guerra”; Kevin es la persona paciente que sigue esperando esa llamada a filas para poder ayudar en cuanto se lo reclame el Coronel Carvalhal. Ya tuvo que pedirle un esfuerzo el técnico luso en Vallecas cuando quería poner defensa de cinco y tenía a Hugo Mallo lesionado. Era un partido complicado porque el Celta olía a puestos de descenso y venía de perder con Osasuna en el debut del técnico de Braga. Kevin llevaba 0 minutos jugados y salió al campo con muchas ganas y a tope de intensidad. Aguantó 72 minutos hasta que las piernas ya no le siguieron. El de Nigrán ayudó a mantener la portería a cero fuera de casa, algo que no sucedía desde la primera salida en agosto. Después jugó 6 minutos contra el Sevilla para darle solidez a una defensa que temblaba con el 1-1; poco más de 6 minutos para defender con uñas y dientes el 1-0 contra el Athletic, u otros 6 minutos contra el Betis para ayudar a aguantar un 3-4 que era oro molido. En la Copa del Rey también contribuyó jugando 20 minutos contra el Algar o 59 contra el Espanyol. Es una cifra de minutos jugados muy baja pero la competencia es muy fuerte con el capitán del Celta y con un fichaje que llegó del Barcelona para ese mismo puesto. El soldado raso respetando los galones de sus superiores en el ejército celeste.

Pero Kevin Vázquez sigue trabajando en el día a día con esa paciencia infinita que tiene y con las mismas ganas de poder ayudar a SU Celta en cada minuto que le den y con cada oportunidad que le ofrezcan. Ahora podría volver a jugar de titular porque Hugo Mallo está sancionado y Mingueza todavía está en fase de recuperación. Sin rechistar, sin una mala cara y con la misma sonrisa y concentración de siempre Kevin espera pacientemente.

Y el paciente nigranés no pierde la calma al ver que el club no mueve ficha con su renovación o no le dice nada para poder continuar en la que es su casa de siempre. Aunque el contexto invite más a ser impaciente que paciente, Kevin sigue siendo el Kevin de siempre; al que llaman para ir a uno y mil actos con las peñas, temas solidarios o presentaciones del Galicia Sport. Porque de ese hombre paciente siempre va a salir un sí para el Celta. Y ahí está esperando su oportunidad para este fin de semana. Puede ser otra vez contra el Rayo Vallecano. La teoría de Nietzsche del eterno retorno aplicada en el lateral derecho celeste. La oportunidad se la merece. Pero el que decide es el Coronel Carvalhal.