De luces de neón a claridad y transparencia: así han cambiado las tiendas eróticas en los últimos años
El mercado español apuesta por la educación y divulgación sexual para romper estereotipos
Juguetes sexuales de silicona sobre un fondo rosa. Juguete erótico para la diversión. Gadget de sexo y dispositivo de masturbación. - Fotografía de stock / Getty images
A Coruña
La educación sexual interesa cada vez más a los jóvenes. Las redes sociales y las empresas lo notan y construyen estrategias para conectar con ellos. Un ejemplo son las tiendas eróticas españolas. En los últimos años han roto los esquemas a los que estábamos acostumbrados. Atrás quedó la imagen preconcebida de bajos oscuros, detalles en rojo pasión y un aura de vergüenza silenciosa. El negocio se ha modernizado y, con él, su imagen.
Las redes sociales han jugado un papel importante en esta transición. Las marcas han apostado en los últimos años por nuevos perfiles profesionales como, por ejemplo, los influencers. Figuras con mucho tirón entre jóvenes entre los 15 y los 30 años. Es habitual que a través de colaboraciones y campañas publicitarias muestren a sus seguidores juguetes sexuales de forma clara, transparente y sin tabúes. La estrategia ha sido clara: normalizar las relaciones sexuales y el placer.
El viaje ha estado marcado por poner en el centro cuestiones claves para la agenda mediática durante los últimos años. El feminismo, el consentimiento y el respeto por las parejas sexuales han sido mensajes muy repetidos tanto por los influencers como por las tiendas eróticas. Un ejemplo es Noemí Casquet. Esta periodista especializada en sexualidad suma en su perfil de Instagram más de 2 millones de seguidores y colabora de forma habitual con empresas como Diversual.
En esta ecuación el mercado español juega un papel protagonista. Proyectos nacionales como Platanomelon, afincado en Barcelona, o Diversual, con sede en Alicante, suman más de un millón y medio de seguidores en Instagram. Ambas, colaboran de forma habitual con influencers, pero también han sabido dar peso a sus propias redes sociales. Lejos de mostrarse como meras tiendas eróticas han apostado por presentarse como plataformas de divulgación y educación sexual.
Sus perfiles destacan por dar consejos e información sobre sexo y relaciones a través de expertos como sexólogos o psicólogos. Usan un lenguaje directo y sin rodeos. El objetivo es que todo el mundo entienda el mensaje. Además, habilitan canales para que los usuarios trasladen dudas e inquietudes sobre su vida y desarrollo sexual. Una dinámica que los jóvenes agradecen ante la falta de información sobre sexualidad que hay en escuelas y en algunos núcleos familiares.
Internet, fuente de información
Internet se ha convertido en una gran fuente de información para adolescentes, según el INJUVE.
Con todo, el libre acceso a contenidos en la web también puede desencadenar en la asimilación de contenidos perjudiciales para un correcto desarrollo sexual. Es el caso de la pornografía y las prácticas que esta refleja. Entre tanta información, y fuentes no siempre fiables, las tiendas eróticas han sabido presentarse como espacios seguros con profesionales claros y directos. Una estrategia que los usuarios jóvenes, pero también adultos, han sabido valorar.
Un estudio reciente llamado Branded Content para la educación sexual, de la periodista de esta emisora Silvia Penelas, ha demostrado que la comunicación de las tiendas eróticas en Instagram ha cambiado la forma en la que son percibidas, además de incentivar la educación sexual entre los jóvenes. Es motivo del primer premio de la V Edición de los Premios de Investigación en Comunicación Digital de la UAB.
