Contra el calor, toallas heladas

A Coruña

El partido de este domingo en Córdoba no es un encuentro cualquiera. No lo es por diversos motivos. El choque se ha señalado de manera especial en el calendario para que el Dépor rompa el gafe a domicilio, donde no gana desde el 19 de febrero, cuando batió al Talavera. Aún conscientes de la dificultad de batir a un equipo que partía como candidato al ascenso directo, el vestuario quiere encadenar dos victorias y llegar con la mejor inercia a las jornadas finales. Será también un encuentro distinto por la ausencia de Lucas, que abre las puertas de la titularidad a Svensson y Arturo. Y tampoco es un encuentro normal por las temperaturas que se esperan en Andalucía, lo que ha motivado un cambio en las rutinas del Deportivo.

Este fin de semana la mitad sur de la península quedará bajo los efectos de un anticiclón que lleva a asociada una ola de calor inédita a estas alturas del año. En Córdoba esperan temperaturas cercanas a los 40 grados, lo que ha motivado que el comienzo del partido se haya retrasado dos horas, a las ocho de la tarde. El Deportivo comenzará a preparar la cita mañana en Abegondo, trasladándose al estadio de Riazor el jueves. El viernes repetirá en Abegondo y el sábado realizará una suave sesión en la Ciudad Deportiva del Córdoba.

Motivos

El Deportivo viaja en avión a este desplazamiento y la posibilidad de entrenar el día antes en Córdoba le encaja dentro de sus horarios. Será un entrenamiento corto, de hecho el equipo trabajará en un campo que carece de iluminación artificial, lo que hace pensar en una sesión “de activación” para evitar acumular muchas horas sin actividad entre el último entrenamiento y el partido. “Servirá para hacerse una idea de lo que nos espera el día después” afirman desde el club. Y es que aunque lo peor de la ola de calor se espera para mañana y pasado, alcanzándose los 40 grados, a la hora del partido están previstos entre 36-37. En situaciones así el calor pasa factura a los futbolistas, ya que impide que la temperatura corporal baje aunque el jugador cese en su esfuerzo. Por esa razón el Deportivo utilizará toallas heladas en la pausa para la hidratación prevista en el minuto 30 de cada período. Esa es la única manera de conseguir bajar la temperatura del cuerpo y recuperar mínimamente a los futbolistas aprovechando una pausa tan pequeña. Desde el club lamentan que el partido no se haya retrasado una hora más, a las nueve, porque a esa hora están previsto dos grados menos, una diferencia que, aunque parezca pequeña, sí tiene influencia en el rendimiento de los deportistas.